Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Deuteronomio 33:9 - Biblia Católica (Latinoamericana)

9 El que fue capaz de decir a sus padres: 'A ustedes no los conozco'; y no les hizo caso a sus hermanos e hijos. Están a cargo de tus palabras y cuidan de tu Alianza.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

9 Quien dijo de su padre y de su madre: Nunca los he visto; Y no reconoció a sus hermanos, Ni a sus hijos conoció; Pues ellos guardaron tus palabras, Y cumplieron tu pacto.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Los levitas obedecieron tu palabra y cumplieron tu pacto. Fueron más leales a ti que a sus propios padres. Ignoraron a sus parientes y no reconocieron a sus propios hijos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

9 El que dijo de su padre y de su madre: ¡No los conozco! Y no reconoció a sus hermanos, E ignoró a sus propios hijos. Porque guardaron tu dicho, Y vigilaron sobre tu pacto.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 el que dijo de su padre y de su madre: no les he visto, el que no reconoce a sus hermanos, y a sus hijos ignora; pues ellos guardaron tu palabra y conservarán tu alianza.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 El que dijo a su padre y a su madre: No los he visto; Y no reconoció a sus hermanos, ni conoció a sus propios hijos; pues ellos guardaron tu palabra, y observaron tu pacto.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Deuteronomio 33:9
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Si alguno quiere venir a mí y no se desprende de su padre y madre, de su mujer e hijos, de sus hermanos y hermanas, e incluso de su propia persona, no puede ser discípulo mío.


Pero Jesús dijo al que le daba el recado: '¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos?'


El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí.


¿Con quién tratamos de conciliarnos?: ¿con los hombres o con Dios? ¿Acaso tenemos que agradar a los hombres? Si tratara de agradar a los hombres, ya no sería siervo de Cristo.


Así que nosotros no miramos ya a nadie con criterios humanos; aun en el caso de que hayamos conocido a Cristo personalmente, ahora debemos mirarlo de otra manera.


Le enviaron, pues, discípulos suyos junto con algunos partidarios de Herodes a decirle: 'Maestro, sabemos que eres honrado y que enseñas con sinceridad el camino de Dios. No te preocupas por quién te escucha, ni te dejas influenciar por nadie.


Ellos decían: 'Vengan, tramemos un atentado contra Jeremías, porque no por eso van a faltar sacerdotes que nos digan la Ley, ni sabios que den consejos, ni profetas que transmitan palabras de Yavé. Vengan, debemos contradecirle y no hacer más caso a todas sus palabras.


Por eso, los hombres lo deben temer, todos los sabios juntos no son nada ante él.


y aun esto es poco a tus ojos, oh Dios, que también haces promesas a mi descendencia para el futuro lejano. Me has mirado como si fuera un hombre distinguido, ¡oh Yavé Dios!


No se hará impuro por haberse acercado a un muerto, aun por un padre o una madre.


Entonces Moisés dijo a Aarón y a sus hijos Eleazar e Itamar: 'No lleven la cabeza cubierta ni rasguen sus vestiduras en señal de duelo, no sea que mueran ustedes y el castigo se extienda a toda la comunidad. Más bien son sus hermanos, toda la gente de Israel, quienes harán duelo por el fuego de Yavé.


Lía quedó embarazada y dio a luz un hijo, al que llamó Rubén, porque decía: 'En verdad Yavé ha visto mi aflicción; ahora mi esposo me amará.


Te pido insistentemente ante Dios, Cristo Jesús y los santos ángeles que observes estas reglas con imparcialidad, sin hacer diferencias.


Dios mismo nos ha examinado y nos ha encargado su evangelio, y por tanto nuestra predicación procura agradar, no a los hombres, sino a Dios, que penetra los corazones.


Lo que escojo, Señor, yo lo he dicho, es observar tus palabras.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម