2 Tesalonicenses 1:4 - Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Nosotros mismos hablamos de ustedes con orgullo en las Iglesias de Dios, porque se mantienen firmes y guardan su fe en medio de todas las persecuciones y pruebas que deben soportar.

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Biblia Reina Valera 1960

⁴ tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ Con orgullo les contamos a las demás iglesias de Dios acerca de la constancia y la fidelidad de ustedes en todas las persecuciones y privaciones que están sufriendo.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ hasta el punto que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en medio de todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis;

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ Esto nos permite sentirnos orgullosos de vosotros en las iglesias de Dios por vuestra constancia y vuestra fe en medio de todas vuestras persecuciones y de las tribulaciones que soportáis.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁴ tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, de vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que sufrís.

2 Tesalonicenses 1:4 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Hebreos 10:36

Es necesario que sean constantes en hacer la voluntad de Dios, para que consigan su promesa.

1 Tesalonicenses 2:14

De hecho, hermanos, les tocó imitar a las Iglesias de Dios en Judea, Iglesias de Cristo Jesús, pues han sido perseguidos por sus compatriotas del mismo modo que ellos lo fueron por los judíos.

1 Tesalonicenses 2:19

En efecto, ¿quién sino ustedes es nuestra esperanza, nuestra alegría y la corona de la que nos sentiremos orgullosos ante Jesús, nuestro Señor, cuando venga?

1 Tesalonicenses 1:3

recordamos ante Dios, nuestro Padre, su fe que produce frutos, su amor que sabe actuar, su espera de Cristo Jesús, nuestro Señor, que no se desanima.

2 Corintios 7:14

No quedé defraudado por lo bien que le había hablado de ustedes. Siempre digo las cosas como son, y también en esta oportunidad se confirmó el elogio que de ustedes hice a Tito.

Apocalipsis 14:12

Este es el tiempo de aguantar para los santos, para todos aquellos que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.

1 Corintios 7:17

Fuera de este caso, que cada uno siga en la condición en que lo puso el Señor, en la situación en que lo encontró la llamada de Dios. Esta es la regla que doy en todas las Iglesias.

2 Pedro 1:6

la firmeza con el conocimiento, el conocimiento con el dominio de los instintos, el dominio de los instintos con la constancia, la constancia con la piedad,

Santiago 5:11

Fíjense que llamamos felices a aquellos que fueron capaces de perseverar. Han oído hablar de la constancia de Job y saben lo que al final el Señor hizo por él, pues el Señor es compasivo y misericordioso.

Hebreos 6:15

Y, perseverando, Abrahán vio realizarse las promesas de Dios.

2 Tesalonicenses 3:5

Que el Señor fije sus corazones en la buena dirección para que puedan amar a Dios y soportar cristianamente la adversidad.

2 Corintios 9:4

no sea que, al llegar conmigo los de Macedonia, los encuentren desprevenidos. ¡Sería para mí una vergüenza, por no decir para ustedes!

2 Corintios 9:2

pues conozco su buena disposición, y lo dije con orgullo ante los macedonios: 'En Acaya están preparados para la colecta desde el año pasado. Y el entusiasmo de ustedes fue un estímulo para la mayoría de ellos.

Romanos 12:12

Tengan esperanza y sean alegres. Sean pacientes en las pruebas y oren sin cesar.

Romanos 8:25

Esperemos, pues, sin ver, y lo tendremos, si nos mantenemos firmes.

Romanos 2:7

Dará vida eterna a quien haya seguido el camino de la gloria, del honor y la inmortalidad, siendo constante en hacer el bien;'

2 Corintios 7:4

Yo sé que puedo contar con ustedes, y estoy realmente orgulloso de ustedes; esto me conforta y me llena de alegría en todas estas amarguras.

2 Corintios 12:10

Por eso acepto con gusto lo que me toca sufrir por Cristo: enfermedades, humillaciones, necesidades, persecuciones y angustias. Pues si me siento débil, entonces es cuando soy fuerte.

Hebreos 6:12

No se vuelvan flojos, sino más bien imiten a aquellos que por su fe y constancia consiguieron al fin lo prometido.