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2 Samuel 19:6 - Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Joab entró en la pieza del rey y le dijo: 'Hoy cubres de vergüenza a todos tus servidores. Te salvaron la vida, la vida de tus hijos y de tus hijas, la vida de tus mujeres y de tus concubinas.

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Biblia Reina Valera 1960

6 amando a los que te aborrecen, y aborreciendo a los que te aman; porque hoy has declarado que nada te importan tus príncipes y siervos; pues hoy me has hecho ver claramente que si Absalón viviera, aunque todos nosotros estuviéramos muertos, entonces estarías contento.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Parece que usted ama a los que lo odian y odia a los que lo aman. Hoy nos ha dejado muy en claro que sus comandantes y sus tropas no significan nada para usted. Pareciera que si Absalón hubiera vivido y todos nosotros estuviéramos muertos, estaría contento.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 amando a los que te aborrecen y aborreciendo a los que te aman, porque hoy has demostrado que nada te importan tus príncipes y siervos, pues hoy me has hecho ver claramente que si Absalón estuviera vivo y todos nosotros muertos, entonces estarías contento.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Presentóse Joab en la casa donde estaba el rey y le dijo: 'Tú cubres hoy de vergüenza el rostro de todos tus súbditos que han salvado tu vida, la de tus hijos e hijas, y la de tus mujeres y concubinas,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 amando a los que te aborrecen, y aborreciendo a los que te aman: porque hoy has declarado que nada te importan tus príncipes y siervos; pues hoy echo de ver que si Absalón viviera, bien que nosotros todos estuviéramos hoy muertos, entonces estarías contento.

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2 Samuel 19:6
6 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Pablo contestó: 'Hermanos, yo no sabía que fuera el sumo sacerdote, pues está escrito: No insultarás al jefe de tu pueblo.


El puede decir a un rey: ¡Infame!, y a los príncipes: ¡Malvados!


El rey, mientras tanto, se había puesto un velo en la cara y exclamaba en alta voz: '¡Hijo mío Absalón! ¡Absalón hijo mío! ¡Hijo mío!'


Pero tú amas a los que te odian y odias a los que te aman. Lo estás demostrando ahora: tus servidores y sus jefes son nada para ti, y si Absalón estuviera ahora con vida y todos nosotros muertos, tú estarías muy feliz.


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