1 Samuel 23:7 - Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ Le avisaron a Saúl que David había entrado en Queila; Saúl dijo: 'Dios lo ha puesto en mis manos, pues al entrar en una ciudad con puertas y candados se ha encerrado solo'.

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Biblia Reina Valera 1960

⁷ Y fue dado aviso a Saúl que David había venido a Keila. Entonces dijo Saúl: Dios lo ha entregado en mi mano, pues se ha encerrado entrando en ciudad con puertas y cerraduras.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Pronto Saúl se enteró de que David estaba en Keila. «¡Excelente! —exclamó—. ¡Ya lo tenemos! Dios me lo entregó en mis manos, porque se ha quedado atrapado en una ciudad amurallada».

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ Cuando informaron a Saúl que David había ido a Keila, Saúl dijo: ¡’Elohim lo ha desamparado en mi mano, encerrándose al entrar en una ciudad de puertas y barras!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ Anunciaron a Saúl que David había ido a Queilá, y dijo Saúl: 'Dios lo ha entregado en mis manos, pues ha ido a encerrarse en una ciudad que tiene puertas y cerrojos'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁷ Y fue dicho a Saúl que David había venido a Keila. Entonces dijo Saúl: Dios lo ha traído a mis manos; pues él se ha encerrado, entrando en ciudad con puertas y cerraduras.

1 Samuel 23:7 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Job 20:5

el triunfo del malvado es breve y el gozo del perverso no dura más que un instante?

1 Samuel 23:14

David permaneció en los refugios del desierto, en la montaña y en el desierto de Zif. Saúl lo buscaba todos los días, pero Dios no lo puso en sus manos.

Éxodo 15:9

Dijo el enemigo: 'Los perseguiré y los alcanzaré, los tendré a merced, llevaré sus despojos; sacaré mi espada y mi mano los matará.

Éxodo 14:3

Así, pues, Faraón pensará que los hijos de Israel andan errantes en el país y que no pueden atravesar el desierto.

1 Samuel 23:6

(Cuando Ebiatar hijo de Ajimelec había huido donde David a Queila, había bajado con el efod).

1 Samuel 23:8

Saúl convocó a todo el pueblo para la guerra y bajaron a Queila para sitiar a David y a sus hombres.

Salmos 31:21

Bendito sea el Señor, su gracia hizo maravillas para mí: Mi corazón es como una ciudad fuerte.