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1 Juan 2:9 - Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Si alguien piensa que está en la luz mientras odia a su hermano, está aún en las tinieblas.

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Biblia Reina Valera 1960

9 El que dice que está en la luz, y aborrece a su hermano, está todavía en tinieblas.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Si alguien afirma: «Vivo en la luz», pero odia a otro creyente, esa persona aún vive en la oscuridad.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 El que dice estar en la luz y aborrece a su hermano, está en las tinieblas.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Quien dice que está en la luz y odia a su hermano, permanece en las tinieblas.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 El que dice que está en luz, y aborrece a su hermano, está todavía en tinieblas.

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1 Juan 2:9
14 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Si uno dice 'Yo amo a Dios', y odia a su hermano, es un mentiroso. Si no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve.


En cambio, quien odia a su hermano está en las tinieblas y camina en tinieblas; y no sabe adónde va, pues las tinieblas lo han cegado.


Esta gente no sabe ni comprende, no dan más que vueltas en sus tinieblas, y las bases de la tierra se conmueven.


En cambio, quien no tiene todo esto es ciego y corto de vista, y se ha olvidado de que fue purificado de sus pecados pasados.


Si alguien dice: 'Yo lo conozco', pero no guarda sus mandatos, ése es un mentiroso y la verdad no está en él.


Si decimos que estamos en comunión con él mientras caminamos en tinieblas, somos unos mentirosos y no estamos haciendo la verdad.


Jesús les contestó: 'Si fueran ciegos, no tendrían pecado. Pero ustedes dicen: 'Vemos', y ésa es la prueba de su pecado.


No odies en tu corazón a tu hermano; pero corrígelo, no sea que te hagas cómplice de sus faltas.


Absalón tampoco le dijo nada, ni buenas ni malas palabras, pero sentía odio por él debido a que había violado a su hermana Tamar.


Uno de aquellos días, Pedro tomó la palabra en medio de ellos -había allí como ciento veinte personas- y les dijo:


En esto se reconocen los hijos de Dios y los del Diablo: el que no sigue el camino de rectitud no es de Dios, y tampoco el que no ama a su hermano.


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