1 Corintios 10:21 - Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ No pueden beber al mismo tiempo de la copa del Señor y de la copa de los demonios, ni pueden tener parte en la mesa del Señor y en la mesa de los demonios.

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Biblia Reina Valera 1960

²¹ No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Ustedes no pueden beber de la copa del Señor y también de la copa de los demonios. No pueden comer de la Mesa del Señor y también de la mesa de los demonios.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ No podéis beber la copa del Señor y la copa de los demonios, no podéis participar de la mesa del Señor y de la mesa de los demonios.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ No podéis beber la copa del Señor y la copa de los demonios; no podéis tomar parte en la mesa del Señor y en la mesa de los demonios.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²¹ No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios.

1 Corintios 10:21 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Mateo 6:24

Nadie puede servir a dos patrones: necesariamente odiará a uno y amará al otro, o bien cuidará al primero y despreciará al otro. Ustedes no pueden servir al mismo tiempo a Dios y al Dinero.

1 Reyes 18:21

Entonces Elías se acercó al pueblo y dijo: '¿Hasta cuándo saltarán de un pie al otro? Si Yavé es Dios, síganlo; si lo es Baal, síganlo'. El pueblo no respondió.

Isaías 65:11

Pero a ustedes, que abandonan a Yavé, que se olvidan de su Cerro Santo, que le preparan una mesa a Gad y que llenan la copa de Meni,

1 Corintios 10:16

La copa de bendición que bendecimos, ¿no es comunión con la sangre de Cristo? Y el pan que partimos, ¿no es comunión con el cuerpo de Cristo?

1 Corintios 8:10

Si uno de ellos te ve a ti, con tu buen conocimiento, sentado a la mesa en un salón del templo, su conciencia poco formada se dejará arrastrar y comerá también él esa carne.

Jeremías 44:8

al provocarme con las cosas que hacen sus manos o quemando incienso a dioses extranjeros en este suelo de Egipto a donde se han venido a instalar. Así cooperan ustedes mismos a su propia ruina y hacen que todo el mundo los maldiga y se ría de ustedes.