Biblia Todo Logo
オンライン聖書

- 広告 -





Génesis 50:5 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

5 que cuando mi padre estaba a punto de morir, me hizo jurarle que yo lo enterraría en su propia tumba, la cual está en Canaán. Pídanle que me deje ir a enterrar a mi padre, y que luego volveré.

この章を参照 コピー


その他のバージョン

Biblia Reina Valera 1960

5 Mi padre me hizo jurar, diciendo: He aquí que voy a morir; en el sepulcro que cavé para mí en la tierra de Canaán, allí me sepultarás; ruego, pues, que vaya yo ahora y sepulte a mi padre, y volveré.

この章を参照 コピー

Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Díganle que mi padre me hizo pronunciar un juramento. Me dijo: “Escucha, yo estoy a punto de morir. Lleva mi cuerpo de regreso a la tierra de Canaán y entiérrame en la tumba que preparé para mí mismo”. Por lo tanto, le ruego que me permita ir a enterrar a mi padre. Y después del entierro, regresaré sin demora».

この章を参照 コピー

Biblia Católica (Latinoamericana)

5 Antes de morir, mi padre me hizo prometerle bajo juramento que yo lo habría de sepultar en el sepulcro que él mismo se había preparado en el país de Canaán. Así pues, permíteme ahora subir a enterrar a mi padre, y luego volveré.

この章を参照 コピー

La Biblia Textual 3a Edicion

5 Mi padre me juramentó, diciendo: He aquí voy a morir. Me sepultarás° en el sepulcro que yo preparé para mí mismo en la tierra de Canaán. Ahora pues, permíteme que suba a sepultar a mi padre, y volveré.

この章を参照 コピー

Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 Mi padre me hizo jurar: 'Estoy a punto de morir; sepúltame en el sepulcro que excavé para mí en la tierra de Canaán'. Permítame, pues, subir a sepultar a mi padre, y luego volveré'.

この章を参照 コピー




Génesis 50:5
19 相互参照  

“Y tú, ¿quién te crees? ¿Quién te dio permiso para construirte una tumba en el cementerio de los reyes?


Lo pusieron sobre una camilla, con toda clase de perfumes. Luego encendieron en su honor una gran hoguera, y lo enterraron en la tumba que él mismo había mandado hacer en la Ciudad de David, donde estaban enterrados sus antepasados.


y lo puso en una tumba. Era una tumba nueva, que hacía poco tiempo él había ordenado construir en una gran roca. José tapó la entrada de la tumba con una piedra muy grande, y se fue.


Cuando llegue ese día, volverás a ser polvo, porque polvo fuiste, y el espíritu volverá a Dios, pues él fue quien lo dio.


Cuando llegue ese día, te darán miedo las alturas y los peligros del camino. Tu almendro echará flores blancas, el saltamontes y la alcaparra te resultarán una carga, y no te servirán de nada. Cuando llegue ese día, irás camino al lugar de donde ya no volverás, y en la calle te rodearán los que lamenten tu muerte.


Podemos vivir cien años, y llegar a tener cien hijos, pero si no disfrutamos de las cosas buenas de la vida, ni tampoco nos entierran como se debe, yo digo que un niño que nace muerto ha tenido mejor suerte que nosotros.


Por toda Jerusalén derramaron la sangre de los muertos, y a los muertos nadie los entierra.


y un día me arrojarás a la tumba, que es nuestro destino final.


Saúl le dijo: —Dime lo que hiciste. Y Jonatán le respondió: —Lo único que hice fue probar un poco de miel. ¿Por eso me van a matar?


Al contrario, moriré de este lado del río. »Ustedes sí lo cruzarán, y conquistarán esa tierra.


Algún tiempo después, José les dijo a sus hermanos: «Ya me falta poco para morir. Pero pueden estar seguros de que Dios vendrá a ayudarlos y los hará volver a la tierra que, bajo juramento, prometió darles a Abraham, a Isaac y a Jacob. Ustedes, por su parte, tienen que jurarme que se llevarán de aquí mis restos cuando yo muera».


Luego le dijo a José: —Ya me falta poco para morir, pero Dios estará contigo y te hará volver a la tierra de tus abuelos.


»Muy duro tendrás que trabajar para conseguir tus alimentos. Así será hasta el día en que mueras, y vuelvas al polvo de la tierra, del cual fuiste tomado. Tú no eres más que polvo, ¡y al polvo tendrás que volver!»


Pasados los días de duelo, José les dijo a los miembros de la corte del rey de Egipto: —Si puedo pedirles un favor, yo les agradecería que le hablaran al rey por mí. Díganle


El rey le respondió: —Ve a enterrarlo, tal como te pidió que lo hicieras.


私たちに従ってください:

広告


広告