2 Samuel 16:5 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

^5-6 Cuando el rey David llegó a Bahurim, salió a su encuentro Simí hijo de Guerá, que era pariente de Saúl. Simí empezó a arrojarles piedras a David y a los guardias que lo rodeaban,

その他のバージョン

Biblia Reina Valera 1960

⁵ Y vino el rey David hasta Bahurim; y he aquí salía uno de la familia de la casa de Saúl, el cual se llamaba Simei hijo de Gera; y salía maldiciendo,

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁵ Mientras el rey David llegaba a Bahurim, salió un hombre de la aldea maldiciéndolos. Era Simei, hijo de Gera, del mismo clan de la familia de Saúl.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁵ Como el rey David se acercara a Bajurim, salió un hombre de la familia de Saúl que se llamaba Simeí, hijo de Guera. Mientras caminaba, iba lanzando toda clase de maldiciones.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁵ Al llegar el rey David a Bahurim, he aquí que de allí venía saliendo un hombre de la familia de la casa de Saúl, de nombre Simei ben Gera; y en tanto que salía echaba maldiciones.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁵ Cuando el rey David llegó a Bajurín, salió de allí un hombre del clan de la casa de Saúl, llamado Semeí, hijo de Guerá. Avanzaba profiriendo maldiciones

2 Samuel 16:5 相互参照

2 Samuel 3:16

Pero Paltiel se fue llorando tras ella, hasta que llegaron a un pueblo llamado Bahurim. Allí Abner le dijo: «¡Ya basta de lloriqueos! ¡Vuelve a tu casa!» Y Paltiel regresó.

Éxodo 22:28

28 (27) »No hablen mal de los jueces, ni maldigan a sus gobernantes.

2 Samuel 17:18

Pero un niño se dio cuenta, y fue a contárselo a Absalón. Entonces Jonatán y Ahimaas huyeron rápidamente a la casa de un hombre que vivía en Bahurim. Cuando llegaron allá, se escondieron dentro de un pozo.

Isaías 8:21

»La gente irá de un lado para el otro, hambrienta y maltratada; el hambre los pondrá furiosos y maldecirán a su rey y a sus dioses. Mirarán por todas partes

Eclesiastés 10:20

Nunca hables mal del rey ni de la gente poderosa, aunque creas que nadie te oye. Las palabras vuelan; son como los pájaros, y todo llega a saberse.

Proverbios 26:2

La maldición sin motivo jamás surte efecto; es como un ave sin rumbo.

Salmos 109:28

Pero si tú me bendices, no me importa que me maldigan. Mis enemigos están listos para atacarme, pero tú los pondrás en vergüenza y a mí me llenarás de alegría.

Salmos 69:26

26 (27) Aunque tú ya me afligiste y me hiciste sufrir, mis enemigos me persiguen y se burlan de mí.

2 Samuel 16:14

Cuando David y toda su gente llegaron al río Jordán, se quedaron a descansar allí, pues estaban muy cansados.

2 Samuel 16:4

Entonces el rey David le dijo a Sibá: —Desde hoy, todo lo que era de Mefi-bóset será para ti. Yo te lo doy. Sibá le dijo al rey: —Yo estoy para servir a Su Majestad. Muchas gracias por este favor que me hace.

Salmos 102:8

8 (9) No pasa un solo día sin que mis enemigos me ofendan; ¡hasta me echan maldiciones!

Éxodo 22:27

27 (26) pues es lo único que tiene para protegerse del frío de la noche. Yo les digo que si ese hombre me pide ayuda, lo ayudaré, porque sé tener compasión.

2 Samuel 23:31

Abí-albón de Arbá, Asmávet de Bahurim,

Ester 2:5

En Susa vivía un judío de la tribu de Benjamín, llamado Mardoqueo hijo de Jaír, nieto de Simí y bisnieto de Quis.

Job 30:11

Ahora que Dios me humilló, y me encuentro indefenso, descaradamente me ofenden.