Proverbios 10:8 - La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ El sabio de corazón acepta los mandamientos, Pero el insensato de labios se hunde.

Più versioni

Biblia Reina Valera 1960

⁸ El sabio de corazón recibirá los mandamientos; Mas el necio de labios caerá.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ El sabio con gusto recibe instrucción, pero el necio que habla hasta por los codos caerá de narices.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ El hombre de corazón sabio acepta los consejos, mientras que el pretencioso corre a su perdición.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ El hombre sabio acepta mandatos, el de labios necios va a la perdición.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁸ El sabio de corazón recibirá los mandamientos; mas el necio de labios caerá.

Proverbios 10:8 Riferimenti Incrociati

Salmos 119:34

Hazme entender, y atesoraré tu Ley, Y la guardaré con todo el corazón.

Proverbios 1:5

Oígalo también el sabio y aumentará el saber, Y el entendido obtendrá consejos sabios.

Proverbios 10:10

El que guiña el ojo acarrea tristeza, Y el necio de labios será castigado.

Proverbios 10:14

Los sabios atesoran conocimiento, Pero la boca del necio es calamidad cercana.

Proverbios 12:1

El que ama la corrección ama el conocimiento, Pero el que aborrece la reprensión es necio.

Proverbios 12:13

En la falsedad de sus labios se enreda el malvado, Pero el justo saldrá de la tribulación.

Proverbios 13:3

El que guarda su boca guarda su alma, Pero el que suelta sus labios tendrá calamidad.

Proverbios 14:23

En toda labor hay fruto, Pero la charlatanería sólo trae indigencia.

Proverbios 14:8

Discernir el camino es sabiduría del sagaz, Pero la necedad de los necios es puro engaño.

Proverbios 9:8

No reprendas al escarnecedor, no sea que te aborrezca, Corrige al sabio, y te amará.

Proverbios 9:9

Da al sabio, y será más sabio, Enseña al justo, y aumentará su saber.

Eclesiastés 10:12

Las palabras del sabio son provechosas, Pero los labios del necio causan su propia ruina.

Santiago 3:13

¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en la mansedumbre de la sabiduría.