Mateo 6:21 - La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ porque donde está tu tesoro, allí° estará también tu corazón.

Più versioni

Biblia Reina Valera 1960

²¹ Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Donde esté tu tesoro, allí estarán también los deseos de tu corazón.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ Pues donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ porque donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²¹ Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.

Mateo 6:21 Riferimenti Incrociati

Proverbios 4:23

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, Porque de él mana la vida.

Isaías 33:6

La fidelidad será su adorno, la sabiduría y el conocimiento Serán su provisión salvadora, y el temor de YHVH será su tesoro.

Jeremías 22:17

Pero tus ojos y tu corazón no están más que para tu egoísmo, Para derramar la sangre inocente, Para la opresión y para la violencia.

Jeremías 4:14

¡Oh Jerusalem!, lava la maldad de tu corazón para que seas salva. ¿Hasta cuándo se aposentarán tus malos pensamientos dentro de ti?

Mateo 12:34

¡Generación de víboras!° ¿Cómo podéis hablar cosas buenas siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.°

Mateo 6:22

La lámpara del cuerpo es el ojo. Así que, si tu ojo está sano, todo tu cuerpo estará lleno de luz.

Lucas 12:34

porque donde está vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón.

Hechos 8:21

No tienes tú parte ni suerte en este asunto, porque tu corazón no es recto delante de Dios.°

2 Corintios 4:18

no poniendo nuestra mira en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.

Filemón 1:19

Yo Pablo lo escribo de mi mano: ¡Yo pagaré! (por no decirte que aun tú mismo te me debes).

Filemón 1:3

Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre, y del Señor Jesús, el Mesías.

Hebreos 3:12

Mirad pues hermanos, no sea que acaso haya en alguno de vosotros un corazón malo de incredulidad como para apartarse del Dios vivo.