Alkitab Daring

Iklan


Seluruh Alkitab Perjanjian Lama Perjanjian Baru




Cantares 6:4 - La Biblia Textual 3a Edicion

Él Oh amada mía, eres hermosa como Tirsa,° Deseable como Jerusalem, Imponente como un ejército con estandartes.

Lihat babnya
Menunjukkan Interlinear Bible

Lebih banyak versi

Biblia Reina Valera 1960

Hermosa eres tú, oh amiga mía, como Tirsa; De desear, como Jerusalén; Imponente como ejércitos en orden.

Lihat babnya

Biblia Nueva Traducción Viviente

Eres hermosa, amada mía, como la bella ciudad de Tirsa. Sí, eres tan hermosa como Jerusalén, tan majestuosa como un ejército con sus estandartes desplegados al viento.

Lihat babnya

Biblia Católica (Latinoamericana)

Eres hermosa, amada mía, como Tirsá, encantadora como Jerusalén, imponente como tropas ordenadas.

Lihat babnya

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Eres bella, amiga mía, como Tirsá, como Jerusalén, llena de gracia, terrible como ejército formado bajo las banderas.

Lihat babnya

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Hermosa eres tú, oh amada mía, como Tirsa; de desear, como Jerusalén; Imponente como un ejército con sus banderas.

Lihat babnya

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Eres bella, amada mía; bella como la ciudad de Tirsá, hermosa como Jerusalén, majestuosa como las estrellas.

Lihat babnya
Terjemahan lainnya



Cantares 6:4
21 Referensi Silang  

Entonces la mujer de Jeroboam se levantó, se fue y llegó a Tirsa, y al pasar el umbral de la casa, el niño murió.


Y sucedió que cuando Baasa oyó esto, cesó de fortificar a Ramá, y permaneció en Tirsa.


En el tercer año de Asa, rey de Judá, comenzó a reinar Baasa ben Ahías sobre todo Israel en Tirsa, y reinó veinticuatro años.


Hermosa elevación, gozo de toda la tierra; Monte Sión, vórtice del Aquilón,° Ciudad del gran Rey.


’Elohim entre sus palacios, descuella como alta torre.


Desde Sión, perfección de hermosura, ’Elohim resplandeció.


Él He aquí eres hermosa, oh amada mía. ¡Cuán bella eres! Tus ojos son como palomas.


Hijas de Jerusalem, Soy negra,° pero codiciable, Como las tiendas de Cedar, Como las cortinas de Salomón.


¡Oh paloma mía! Tú, que anidas° en las hendiduras de la peña, En las grietas de la escarpa: ¡Muéstrate! ¡Hazme oír tu voz! Porque dulce es tu voz, Y agraciado tu rostro.


¡Toda tú, oh amada mía, eres hermosa, Y en ti no hay mancha!


Ella Yo dormía, pero mi corazón velaba: ¡Una voz! ¡Mi amado está llamando! Él ¡Ábreme, hermana mía, amada mía, Paloma mía, perfecta mía! Porque mi cabeza está empapada de rocío, Y mis cabellos del relente de la noche.


Coro ¿Quién es la que se asoma como el alba, Hermosa como la luna, Límpida como el sol, Imponente como un escuadrón abanderado?


s Todos los que van por el camino baten palmas contra ti, Silban burlones, y menean la cabeza contra la hija de Jerusalem: ¿Es ésta la ciudad perfecta en hermosura, la alegría de toda la tierra?


Aquel día Yo pondré a Jerusalem por piedra pesada° a todos los pueblos. Todos los que intenten cargarla serán despedazados, aunque se junten contra ella todas las naciones de la tierra.


Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para destrucción de fortalezas;


a fin de presentar° la iglesia para sí mismo, gloriosa, sin que tenga° mancha ni arruga, ni cosa semejante, sino que sea santa y sin mancha.


Y° vi que descendía del cielo, de Dios,° la ciudad° santa: Una nueva Jerusalem, dispuesta como una esposa ataviada para su esposo.°