Luego tomó Rebeca los vestidos de Esaú su hijo mayor, los más deseables,° que tenía consigo en la casa, y vistió a Jacob su hijo menor.
1 Reyes 20:6 - La Biblia Textual 3a Edicion Porque si no, mañana a esta hora te enviaré mis siervos, los cuales registrarán tu casa y las casas de tus siervos, y tomarán y se llevarán cuanto haya agradable a tus ojos. Lebih banyak versiBiblia Reina Valera 1960 Además, mañana a estas horas enviaré yo a ti mis siervos, los cuales registrarán tu casa, y las casas de tus siervos; y tomarán y llevarán todo lo precioso que tengas. Biblia Nueva Traducción Viviente pero mañana a esta hora, enviaré a mis funcionarios a registrar tu palacio y las casas de tus funcionarios. ¡Se llevarán todo lo que más valoras!”». Biblia Católica (Latinoamericana) ten por seguro que mañana a la misma hora enviaré a mis servidores a tu casa. Registrarán tu casa y las casas de tus servidores, y recogerán y traerán para acá todo lo que les guste'. Biblia Serafín de Ausejo 1975 mañana a estas horas te mandaré mis servidores, para que registren tu casa y las de tus servidores; echarán mano a todo lo que les parezca valioso y se lo llevarán''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Además mañana a estas horas enviaré yo a ti mis siervos, los cuales inspeccionarán tu casa, y las casas de tus siervos; y sucederá que todo lo precioso que tienes ellos lo tomarán con sus manos y se lo llevarán. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Además, mañana, como a esta misma hora, enviaré a mis oficiales para que registren tu palacio y las casas de tus funcionarios, y les daré permiso de que tomen todo lo que quieran llevarse». |
Luego tomó Rebeca los vestidos de Esaú su hijo mayor, los más deseables,° que tenía consigo en la casa, y vistió a Jacob su hijo menor.
Y David respondió a Gad: Estoy en gran angustia; pero es preferible caer en manos de YHVH, porque muchas son sus misericordias, que caer en manos de los hombres.
Y los mensajeros volvieron otra vez y dijeron: Así habló Ben-hadad, diciendo: Por cierto envié a decirte: Tu plata y tu oro, también tus mujeres y tus hijos me los has de dar.
Y el rey de Israel llamó a todos los ancianos del país, y les dijo: Reconoced ahora y ved cómo éste no busca sino hacer daño; porque exige° mis mujeres y mis hijos, y mi plata y mi oro, sin habérselo yo negado.
veinte tazones de oro por valor de mil dracmas° y dos objetos de bronce reluciente, preciosos° como el oro,
Los que modelan ídolos, todos son vanidad, y sus obras más preciadas no aprovechan; sus testigos no ven ni saben nada, de modo que serán avergonzados.°
¡Gemid, pastores, y clamad! ¡Revolcaos en la ceniza,° mayorales del rebaño! Los días del degüello y de vuestra dispersión están cumplidos; Caeréis como un vaso precioso,
y El adversario ha echado mano a todos sus tesoros, Ella ha visto cómo los gentiles entraban en el Santuario, Aunque Tú diste orden que no entraran en tu congregación.
z En los días de su aflicción y angustia Jerusalem se acuerda de todos los tesoros que tenía desde tiempos antiguos, Hoy que su pueblo cae por mano del adversario, nadie la ayuda. Los enemigos la ven y se burlan de su final.°
Aunque él sea el más fecundo entre sus hermanos, Vendrá el solano,° como soplo de YHVH que sube del desierto, Y su manantial se secará, y se agotará su fuente. Él saqueará el tesoro de todos sus objetos preciosos.°
Porque habéis tomado mi plata y mi oro; Mis cosas preciosas y hermosas° Y las habéis metido en vuestros templos;°