Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Salmos 85:4 - Versión Biblia Libre

4 Acércanos otra vez a ti, ¡Dios de nuestra salvación! Aleja tu ira de nosotros.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación, Y haz cesar tu ira de sobre nosotros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Ahora, restáuranos, oh Dios de nuestra salvación; aparta tu enojo de nosotros una vez más.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Restablécenos, Dios, salvador nuestro, pon fin a tu resentimiento con nosotros.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación, Y haz cesar tu ira de sobre nosotros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 tú reprimes tu enojo, retornando del fuego de tu ira.

Gade chapit la Kopi




Salmos 85:4
17 Referans Kwoze  

Confío en ti, Dios mío. No dejes que sea humillado, y no dejes que mis enemigos triunfen sobre mí.


¡El Señor es mi luz y mi salvación! ¿Quién podrá asustarme? ¡El Señor es la fortaleza de mi vida! ¿De quién he de sentirme aterrorizado?


Pero por su compasión él perdonó su pecado y no los destruyó. Muchas veces contuvo su enojo y no desató toda su furia.


¡Oh, Señor! Dios todopoderoso, ¡Restáuranos! ¡Permite que tu rostro resplandezca sobre nosotros para que podamos ser salvos!


Por favor, Dios, ¡Restáuranos! Permite que tu rostro resplandezca sobre nosotros para que podamos ser salvos.


Dios todopoderoso, ¡Restáuranos! ¡Permite que tu rostro se resplandezca sobre nosotros para que podamos ser salvos!


Muy pronto dejaré de estar enojado con ustedes. Entonces volveré mi ira contra ellos y los destruiré.


En ese momento dirás: “¡Te alabaré, Señor! Aunque estabas enojado conmigo, tu ira ha pasado, y ahora me consuelas.


No te preocupes, he oído los gemidos de Efraín, que dice: “Me has disciplinado muy duramente, como si fuera un ternero que no ha sido adiestrado. Por favor, hazme volver, déjame regresar, porque tú eres el Señor, mi Dios.


Tráenos de regreso a ti, Señor, para que podamos volver a estar contigo. Por favor, restaura nuestras vidas a como era antes.


Por eso, Señor, porque eres tan bueno, aparta tu ira y tu furia contra Jerusalén, tu santo monte. A causa de nuestros pecados y de los de nuestros antepasados, Jerusalén y tu pueblo son objeto de burla por parte de todos nuestros vecinos.


No cederé al ardor de mi ira, no destruiré a Efraín de nuevo. Porque yo soy Dios, y no un ser humano. Yo soy el Santo que vive entre ustedes. No entraré en sus ciudades.


Pero en cuanto a mi, yo pongo mis ojos en el Señor. Esperaré en el Dios que me salva. Mi Dios me escuchará.


Él restaurará la armonía entre padres e hijos, y si eso no ocurre, yo vendré y azotaré la tierra con una maldición.


Ustedes no conocen realmente al Dios que están adorando, mientras que nosotros adoramos al Dios que conocemos, porque la salvación viene de los judíos.


Colocaron sobre él un gran montón de piedras que aún perdura. El Señor ya no estaba enojado. Por eso el lugar fue llamado el Valle de Acor desde entonces.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite