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Salmos 74:1 - Versión Biblia Libre

1 Oh, Dios, ¿por qué nos has rechazado? ¿Acaso será para siempre? ¿Por qué tu ira consume como fuego abrasador a las ovejas de tu rebaño?

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

1 ¿Por qué, oh Dios, nos has desechado para siempre? ¿Por qué se ha encendido tu furor contra las ovejas de tu prado?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Oh Dios, ¿por qué nos has rechazado tanto tiempo? ¿Por qué es tan intensa tu ira contra las ovejas de tu propia manada?

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Biblia Católica (Latinoamericana)

1 ¿Por qué, oh Dios, esos continuos rechazos, y esa ira contra el rebaño de tu redil?

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La Biblia Textual 3a Edicion

1 Maskil de Asaf. Oh ’Elohim, ¿por qué nos has desechado para siempre? ¿Por qué humea tu ira contra las ovejas de tu prado?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Maskil. De Asaf. ¿Por qué Señor, desechas para siempre y humea tu furor contra el rebaño de tus pastos?

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Salmos 74:1
30 Referans Kwoze  

Abandonaré al resto de mi pueblo especial y lo entregaré a sus enemigos. Serán despojo y botín para todos sus enemigos,


Señor, ¿por qué estás tan lejos? ¿Por qué te escondes de mi en momentos de tribulación?


¡Sepan que el Señor es Dios! Él nos creó, y le pertenecemos. Somos su pueblo, el rebaño por el cual se preocupa.


Humo salió de sus fosas nasales y fuego de su boca. Había carbones ardientes quemándose delante de él.


¿Por qué estoy tan desanimado? ¿Por qué me siento tan triste? Esperaré en el Señor. Lo alabaré porque él es el único que me puede salvar, ¡Mi Dios!


Clamo, “Mi Dios, mi roca, ¿Por qué me has olvidado? ¿Por qué debería andar por ahí llorando a causa del ataque de mis enemigos?”


Pero ahora nos has rechazado y has apartado tu gracia de nosotros; has abandonado a nuestros ejércitos.


¡El Señor, el Dios todopoderoso, habla! Él convoca a todos en la tierra, desde el este hasta el oeste.


¡Tú, Dios, nos has rechazado! ¡Nos has quebrantado, te has enojado con nosotros; pero ahora nos recibes nuevamente!


¿Nos has rechazado, Dios? ¿No dirigirás a tus ejércitos?


¿Se habrá cansado el Señor de mi para siempre? ¿Volverá nuevamente a agradarse de mi?


¿Se habrá apagado para siempre su amor inagotable? ¿Se acabaron sus promesas?


Escucha, pueblo mío, lo que tengo para enseñarte. Escucha lo que vengo a decirte.


Entonces seremos tu pueblo, el rebaño de tus pasos, y te alabaremos por siempre. Todas las futuras generaciones te agradecerán.


¿Hasta cuándo, Señor? ¿Acaso estarás enojado con nosotros para siempre? ¿Hasta cuándo arderá tu ira?


Los alimentaste con el pan de las lágrimas, y les diste un tazón lleno de estas para que bebieran.


¿No restaurarás nuestras vidas, de tal modo que tu pueblo pueda hallar felicidad en ti?


Porque él es nuestro Dios, y nosotros el pueblo que cuida como un pastor, el rebaño por el cual se preocupa. Si escuchas hoy su voz llamando,


Pero Moisés suplicó al Señor su Dios, diciendo: “¿Por qué estás enojado con el pueblo que sacaste de la tierra de Egipto con tremendo poder y gran fuerza?


Pero tú, Señor, eres nuestro Padre. Nosotros somos el barro, tú eres el alfarero. Nos has hecho con tus propias manos.


Qué desgracia les espera a los pastores que destruyen y dispersan las ovejas de mi prado! declara el Señor.


Esto es lo que dice el Señor: Sólo si se pudieran medir los cielos de arriba y se pudieran investigar los cimientos de la tierra de abajo, rechazaría yo a todos los descendientes de Israel por todo lo que han hecho, declara el Señor.


¿O es que nos has rechazado por completo? ¿Estás realmente enfadado con nosotros?


“Ustedes son mis ovejas, las ovejas que yo apaciento. Ustedes son mi pueblo, y yo soy su Dios, declara el Señor Dios”.


Vivo yo, declara el Señor Dios, porque mis ovejas no tenían pastor y eran presa de todos los animales salvajes para alimentarse, y porque mis pastores no cuidaban de mis ovejas sino que sólo se alimentaban a sí mismos,


No tengan miedo, pequeño rebaño, porque su Padre se alegra en darles el reino.


El Señor nunca querría perdonarlos. De hecho, su ferviente ira arderá contra ellos, y cada maldición escrita en este libro caerá sobre ellos. El Señor borrará su nombre de la tierra,


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