Salmos 69:8 - Versión Biblia Libre

⁸ Me he convertido en un extranjero entre mis hermanos, los Israelitas. Un forastero para mis propios hermanos.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁸ Extraño he sido para mis hermanos, Y desconocido para los hijos de mi madre.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Hasta mis propios hermanos fingen no conocerme; me tratan como a un extraño.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ me volví como un extraño a mis hermanos, un desconocido para los hijos de mi madre.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ He venido a ser extraño para mis hermanos, Y extranjero para los hijos de mi madre.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Por tu causa es, ciertamente, el que yo sufra vejación y que me cubran el rostro las afrentas,

Salmos 69:8 Referans Kwoze

Salmos 31:11

Soy ridiculizado por mis enemigos, especialmente por mis vecinos. Mis amigos temen verme; la gente que me ve en las calles corre y huye lejos de mí.

Salmos 38:11

Mis amados y amigos no se me acercan porque tienen miedo de contagiarse. Incluso mi familia se ha distanciado.

Salmos 89:51

Tus enemigos se burlan de mí, Señor, se mofan de tu rey a dondequiera que va.

Salmos 89:52

Que el señor sea bendito por siempre. Amén y amén.

Isaías 50:6

Ofrecí mi espalda para que me golpearan y mis mejillas para que me tiraran de la barba. No escondí mi rostro de sus burlas y escupitajos.

Isaías 53:3

La gente lo despreciaba y lo rechazaba. Era un hombre que realmente sufría y que experimentaba el dolor más profundo. Le tratamos como a alguien a quien se le da la espalda con asco: le despreciamos y no le respetamos.

Isaías 53:4

Sin embargo, era él quien cargaba con nuestras debilidades, estaba cargado con nuestro dolor, pero suponíamos que estaba siendo golpeado, vencido y humillado por Dios.

Jeremías 15:15

Tú sabes lo que me pasa, Señor. Por favor, acuérdate de mí y cuida de mí. Castiga a mis perseguidores. Por favor, ten paciencia, ¡no me dejes morir! Tú sabes que soporto las críticas porque quiero honrarte.

Mateo 26:56

Pero todo esto está ocurriendo para que se cumpla lo que escribieron los profetas”. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.

Juan 1:11

Él vino a su pueblo, pero ellos no lo aceptaron.

Juan 7:5

Porque incluso sus propios hermanos no creían realmente en él.

1 Samuel 17:28

Cuando Eliab, el hermano mayor de David, lo oyó hablar con los hombres, se enojó con él. “¿Qué haces aquí?” , le preguntó. “¿Con quién has dejado esas pocas ovejas en el desierto? ¡Sé lo orgulloso y malvado que eres! Sólo has venido a ver la batalla”.