Isaías 18:3 - Versión Biblia Libre

³ Todos los pueblos del mundo, todos los que viven en la tierra, verán cuando se levante un estandarte en los montes, oirán cuando suene una trompeta.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³ Vosotros, todos los moradores del mundo y habitantes de la tierra, cuando se levante bandera en los montes, mirad; y cuando se toque trompeta, escuchad.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Todos ustedes, habitantes del mundo, todos los que viven en la tierra: cuando levante mi bandera de guerra, ¡miren! Cuando toque el cuerno de carnero, ¡escuchen!

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ Ustedes, habitantes del universo y pobladores de la tierra, miren esta bandera en lo alto de los cerros, y escuchen el sonido del clarín.

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Vosotros, habitantes del mundo y moradores de la tierra: Al alzarse la bandera en los montes, mirad; Al soplido del shofar,° escuchad,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Habitantes todos del orbe, moradores de la tierra, al alzarse un pendón en los montes, mirad; al sonar la trompeta, escuchad,

Isaías 18:3 Referans Kwoze

Salmos 50:1

¡El Señor, el Dios todopoderoso, habla! Él convoca a todos en la tierra, desde el este hasta el oeste.

Isaías 1:2

¡Cielos, escuchen! ¡Tierra, presta atención! Porque el Señor ha hablado! Yo crié hijos, y los cuidé, pero ellos se han rebelado contra mí.

Isaías 11:12

Levantará un estandarte para las naciones y reunirá al pueblo exiliado de Israel; reunirá al pueblo disperso de Judá desde los confines de la tierra.

Isaías 13:2

Levanten un estandarte en la cima de una colina desnuda; grítenles; agiten la mano para animarlos a entrar en los palacios de los príncipes.

Isaías 13:4

¡Un ruido viene de las montañas, que suena como el de una gran multitud! ¡Es el sonido rugiente de los reinos, de las naciones que se reúnen! El Señor Todopoderoso convoca un ejército para la guerra.

Isaías 26:11

Señor, tú tienes la mano levantada, pero ellos no lo ven. Que vean tu apasionado compromiso por tu pueblo y se avergüencen; ¡que el fuego reservado para tus enemigos los destruya!

Isaías 31:9

Su “roca” se morirán de miedo, y sus oficiales se aterrorizarán y entrarán en pánico a la vista de la bandera de combate, declara el Señor, que tiene su fuego en Sión, y su horno en Jerusalén.

Isaías 49:22

Esto es lo que dice el Señor Dios: Mira cómo doy la señal a las naciones, cómo enarbolo mi bandera para que todos lo sepan. Los traerán de vuelta, llevando a tus hijos en sus brazos, y levantando a tus hijas sobre sus hombros.

Isaías 5:26

Enviará una señal a las naciones lejanas y silbará a los que viven en los confines de la tierra. Mira qué rápido responden, qué rápido vienen.

Isaías 7:18

En ese momento el Señor silbará para llamar a las moscas de los lejanos ríos de Egipto y a las abejas del país de Asiria.

Jeremías 22:29

¡Mi país, mi país, mi país! ¡Escucha lo que dice el Señor!

Jeremías 51:27

¡Izad una bandera de señales en el país! ¡Toca la trompeta de llamada a la guerra entre las naciones! Preparen a las naciones para atacarla; convoquen a los reinos para marchar contra ella: Ararat, Minni y Asquenaz. Elige a un comandante para que dirija los ejércitos que la atacarán; envía a la caballería de batalla como una nube de langostas.

Miqueas 1:2

¡Escuchen, todas las naciones! ¡Presten atención, habitantes de la tierra! El Señor Dios testifica contra ustedes desde el santo Templo del Señor.

Miqueas 6:2

Ahora, montañas, escuchen el argumento del Señor. Escuchen, fundamentos eternos de la tierra, porque el Señor tiene un caso contra su pueblo. Presentará acusaciones contra Israel.

Miqueas 6:9

La voz del Señor clama a la ciudad. Respetar tu nombre es ser sabio. Presten atención al cetro y al que lo llamó.

Zacarías 9:14

¡Entonces el Señor aparecerá sobre su pueblo y su flecha resplandecerá como relámpago! El Señor Dios hará sonar la trompeta y marchará como un vendaval que viene del sur.

Mateo 13:16

“Benditos los ojos de ustedes, porque pueden ver. También sus oídos, porque pueden oír.

Mateo 13:9

¡Todo el que tenga oídos, escuche!