Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Hebreos 10:8 - Versión Biblia Libre

8 Como se menciona arriba: “No quisiste sacrificios ni ofrendas. Las ofrendas quemadas y los sacrificios por el pecado no te agradaron”, (aunque eran ofrecidos conforme a los requisitos de la ley).

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 Diciendo primero: Sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron (las cuales cosas se ofrecen según la ley),

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Primero, Cristo dijo: «No quisiste sacrificios de animales, ni ofrendas por el pecado, ni ofrendas quemadas ni otras ofrendas por el pecado; tampoco te agradaron todas esas ofrendas» (aun cuando la ley de Moisés las exige).

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Comienza por decir: No quisiste sacrificios ni ofrendas, ni te agradaron holocaustos o sacrificios por el pecado. Y sin embargo esto es lo que pedía la Ley.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Diciendo antes: Sacrificios y ofrendas y holocaustos y expiaciones° no quisiste ni escogiste (las cuales cosas son ofrecidas según la ley).

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Lo primero que dice es: Sacrificios y oblaciones y holocaustos y víctimas por el pecado no quisiste ni te fueron agradables, a pesar de que se ofrecen según la ley.

Gade chapit la Kopi




Hebreos 10:8
4 Referans Kwoze  

No quieres sacrificios ni ofrendas. Me has ayudado a entenderque Tú no estás pidiendo ofrendas quemadas u ofrendas de pecado.


Debemos amarlo con todo nuestro corazón, con todo nuestro entendimiento, y con toda nuestra fuerza, y debemos amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Esto es mucho más importante que las ofrendas y los sacrificios”.


Lo que la ley no pudo hacer porque no tenía el poder para hacerlo debido a nuestra naturaleza pecaminosa, Dios pudo hacerlo. Al enviar a su propio Hijo en forma humana, Dios se hizo cargo del problema del pecado y destruyó el poder del pecado en nuestra naturaleza humana pecaminosa.


Por eso, cuando Cristo vino al mundo dijo: “Tú no querías sacrificios ni ofrendas, sino que preparaste un cuerpo para mí.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite