Hebreos 10:36 - Versión Biblia Libre

³⁶ Es necesario que sean pacientes, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³⁶ porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁶ Perseverar con paciencia es lo que necesitan ahora para seguir haciendo la voluntad de Dios. Entonces recibirán todo lo que él ha prometido.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁶ Es necesario que sean constantes en hacer la voluntad de Dios, para que consigan su promesa.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁶ Porque tenéis necesidad de la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁶ Necesitáis constancia, para que, después de cumplir la voluntad de Dios, obtengáis lo prometido,

Hebreos 10:36 Referans Kwoze

Salmos 37:7

Mantente en la presencia de Dios y espera pacientemente en él. No te angusties por la gente que prospera mientras hacen lo malo.

Salmos 40:1

Esperé pacientemente al Señor, y se volvió hacia mí y escuchó mi clamor.

Mateo 10:22

Todo el mundo los odiará a ustedes porque ustedes me siguen a mi, pero todo aquél que persevere hasta el fin, será salvo.

Mateo 12:50

Porque los que hacen la voluntad de mi Padre celestial, ¡ellos son mi hermano, mi hermana y mi madre!”

Mateo 21:31

¿Cuál de los dos hijos hizo lo que su padre quería?” “El primero”, respondieron ellos. “Les digo la verdad: los recaudadores de impuestos y las prostitutas están entrando al reino de los cielos antes que ustedes”, les dijo Jesús.

Mateo 24:13

pero aquellos que se mantengan firmes hasta el fin serán salvos.

Mateo 7:21

“No todo el que me dice ‘Señor, Señor’ entrará al reino de los cielos, sino solo aquellos que hacen la voluntad de mi Padre que está en el cielo.

Marcos 3:35

Todo aquél que hace la voluntad de Dios, ese es mi hermano, mi hermana y mi madre”.

Lucas 21:19

Si permanecen firmes, ganarán sus vidas.

Lucas 8:15

Las semillas que son sembradas en buena tierra son aquellos que son honestos y hacen lo correcto. Ellos oyen el mensaje de la verdad, se aferran a él, y por su perseverancia producen buena cosecha.

Juan 7:17

Cualquiera que escoge seguir la voluntad de Dios, sabrá si mi enseñanza viene de Dios o si solamente hablo por mí mismo.

Hechos 13:22

Entonces Dios quitó a Saúl, y puso a David como su rey. Dios aprobó a David, diciendo: ‘He encontrado en David, hijo de Isaí, un hombre conforme a mi corazón. Él cumplirá todos mis propósitos’.

Hechos 13:36

Pero David murió, después de haber hecho la voluntad de Dios a su tiempo, y fue sepultado con sus antepasados, y su cuerpo sufrió descomposición.

Romanos 12:12

Permanezcan alegres en la esperanza que tienen, soporten las pruebas que se presenten, y no dejen de orar.

Romanos 12:2

No sigan los caminos de este mundo; por el contrario, sean transformados por la renovación espiritual de sus mentes, a fin de que puedan demostrar cómo es realmente la voluntad de Dios: buena, agradable, y perfecta.

Romanos 2:7

Así que los que han seguido haciendo lo correcto, recibirán gloria, honor, inmortalidad y vida eterna.

Romanos 8:25

Como nosotros esperamos lo que no hemos visto todavía, esperamos pacientemente por ello.

1 Corintios 13:7

El amor nunca se rinde, sigue creyendo, mantiene la confianza, y espera con paciencia en todas las circunstancias.

Gálatas 6:9

No nos cansemos nunca de hacer el bien, pues segaremos en el momento apropiado, si somos perseverantes.

Efesios 6:6

No trabajen simplemente cuando los ven o para recibir aprobación, sino trabajen como siervos de Cristo, haciendo con honestidad la voluntad de Dios,

Colosenses 1:11

Oramos para que sean poderosamente fortalecidos por su sublime fuerza, y tengan gran paciencia y perseverancia.

Colosenses 3:24

porque ustedes saben que el Señor les dará una herencia como recompensa. ¡Recuerden que están sirviendo a Cristo el Señor!

Colosenses 4:12

Epafras, que es uno de ustedes y siervo de Cristo Jesús, envía sus saludos. Él siempre ora con gran fervor por ustedes, para que se mantengan firmes a medida que crecen como cristianos, plenamente convencidos de todo, como Dios quiere.

1 Tesalonicenses 1:3

Recordamos delante de nuestro Dios y Padre la manera como ustedes practican la fe en él, y cómo trabajan arduamente con amor, y que con paciencia guardan la esperanza de nuestro Señor Jesucristo.

Hebreos 11:39

Todas estas personas, aunque tenían la aprobación de Dios, no recibieron lo que Dios había prometido.

Hebreos 12:1

Por eso, siendo que estamos rodeados de tal multitud de personas que demostraron su fe en Dios, despojémonos de todo lo que nos detiene, del pecado seductor que nos hace tropezar, y sigamos corriendo la carrea que tenemos por delante.

Hebreos 13:21

provea todo lo bueno para ustedes a fin de que puedan cumplir su voluntad. Que obre en nosotros, haciendo su voluntad, por medio de Jesucristo, a él sea la gloria por siempre y para siempre. Amén.

Hebreos 6:12

No sean espiritualmente perezosos, sino sigan el ejemplo de los que por medio de su fe en Dios y paciencia son herederos de lo que Dios ha prometido.

Hebreos 6:15

Y así, después de esperar pacientemente, Abrahán recibió la promesa.

Hebreos 6:17

Es por ello que Dios quería demostrar más claramente a los que heredarían la promesa, que él nunca cambiaría su decisión.

Hebreos 9:15

Por eso él es el mediador de una nueva relación de pacto. Puesto que la muerte ha ocurrido para liberarlos de los pecados cometidos bajo la relación del primer pacto, ahora los que son llamados pueden recibir la promesa de una herencia eterna.

1 Pedro 1:9

¡Y por creer en él, su recompensa será la salvación!

1 Juan 2:17

El mundo y sus malos deseos acabarán, pero los que hacen la voluntad de Dios vivirán para siempre.

Apocalipsis 13:10

Todo el que tenga que ir a cautiverio, irá a cautiverio; todo el que tenga que morir a espada, morirá a espada. Esto demuestra la esperanza y la fe de los creyentes en Dios.

Apocalipsis 14:12

Esto quiere decir que los creyentes deben perseverar con paciencia, guardando los mandamientos de Dios y confiando en Jesús.