Génesis 37:32 - Versión Biblia Libre

³² Luego enviaron la colorida túnica a su padre con el mensaje: “Encontramos esto. Por favor, examínalo y ve si es la túnica de tu hijo o no”.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³² y enviaron la túnica de colores y la trajeron a su padre, y dijeron: Esto hemos hallado; reconoce ahora si es la túnica de tu hijo, o no.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³² Luego enviaron la hermosa túnica a su padre con el siguiente mensaje: «Mira lo que encontramos. Esta túnica, ¿no es la de tu hijo?».

Biblia Católica (Latinoamericana)

³² Enviaron la túnica de manga larga a su padre con este mensaje: 'Esto hemos encontrado. Mira a ver si es la túnica de tu hijo.

La Biblia Textual 3a Edicion

³² Luego enviaron la túnica de rayas de colores y la hicieron llegar a su padre, y dijeron: Hemos hallado esto, reconoce pues, y ve si es la túnica de tu hijo o no.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³² Después enviaron la túnica larga y con mangas, y la hicieron llegar a su padre, con estas palabras: 'Hemos encontrado esto. Mira bien si es, o no, la túnica de tu hijo'.

Génesis 37:32 Referans Kwoze

Génesis 37:20

“Vamos, matémoslo y arrojémoslo a una de las fosas. Diremos que algún animal salvaje se lo ha comido. ¡Entonces veremos qué pasa con sus sueños!”

Génesis 37:3

Israel amaba a José más que a cualquiera de sus otros hijos, porque José le había nacido cuando ya era viejo. E hizo una túnica de colores y de mangas largas para José.

Génesis 37:31

Mataron una cabra y mojaron la túnica de José en la sangre.

Génesis 37:33

El padre la reconoció de inmediato y dijo: “¡Esta es la túnica de mi hijo! Algún animal salvaje debe habérselo comido. El pobre José ha sido despedazado, ¡no hay duda de ello!”

Génesis 38:25

Cuando la sacaron, envió un mensaje a su suegro, diciendo: “Estoy embarazada del hombre que posee estas cosas”. Luego añadió: “Por favor, miren con atención este sello, el cordón del sello, y este bastón. ¿A quién le pertenecen?”

Lucas 15:30

Pero ahora este hijo tuyo regresa, después de haber desperdiciado tu dinero en prostitutas, ¡y tu matas el becerro gordo para él!’