Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Génesis 30:25 - Versión Biblia Libre

25 Cuando José nació, Jacob le dijo a Labán: “Déjame ir para volver a casa y a mi propio país.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

25 Aconteció cuando Raquel hubo dado a luz a José, que Jacob dijo a Labán: Envíame, e iré a mi lugar, y a mi tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Poco tiempo después de que Raquel dio a luz a José, Jacob le dijo a Labán: —Por favor, libérame para que regrese a mi hogar en mi propia tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Después de que Raquel hubo dado a luz a José, Jacob dijo a Labán: 'Déjame regresar a mi patria y mi tierra.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

25 Y aconteció que cuando Raquel hubo dado a luz a José, Jacob dijo a Labán: Despídeme, para que pueda irme a mi lugar y a mi tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 Después que Raquel dio a luz a José, dijo Jacob a Labán. 'Déjame partir; que yo pueda irme a mi lugar, a mi tierra.

Gade chapit la Kopi




Génesis 30:25
13 Referans Kwoze  

Entonces el Señor se fue cuando terminó de hablar con Abraham, y Abraham se fue a casa.


Entonces el siervo y sus hombres comieron y bebieron, y pasaron la noche allí. Cuando se levantaron por la mañana, dijo “Es mejor que me vaya ahora a cada de mi señor Abraham”.


“Por favor no me hagan demorar”, les dijo él. “El Señor me ha dado éxito en este viaje, así que déjenme ir donde está mi señor”.


Quédate aquí en este país. Yo estaré contigo y te bendeciré, porque voy a darte a ti y a tus descendientes todas estas tierras. Yo guardaré la promesa solemne que yo le juré a tu padre Abraham.


Entonces vio al Señor que estaba en pie sobre él, y que dijo: “Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham, y el Dios de Isaac. Yo te doy a ti y a tus descendientes la tierra en la que estás acostado ahora.


¡Escucha! Yo estoy contigo y te cuidaré dondequiera que vayas. Yo te traeré de regreso a esta tierra. No te abandonaré, porque voy a hacer lo que te prometí”.


Yo soy el Dios de Betel, donde echaste el aceite de oliva sobre el pilar de piedra y me hiciste una promesa solemne. Ahora prepárate para salir de esta tierra, y devuélvete a la tierra de tus padres’”.


Labán se levantó temprano por la mañana y dio un beso de despedida a sus nietos e hijas. Los bendijo y luego se fue para volver a casa.


Por fe en Dios vivió en la tierra prometida, pero como extranjero, viviendo en tiendas junto a Isaac y Jacob, quienes participaron con él al ser herederos de la misma promesa.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite