2 Reyes 9:24 - Versión Biblia Libre

²⁴ Jehú tomó su arco y le disparó a Joram entre los hombros. La flecha le atravesó el corazón y cayó muerto en su carro.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁴ Pero Jehú entesó su arco, e hirió a Joram entre las espaldas; y la saeta salió por su corazón, y él cayó en su carro.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁴ Jehú tensó su arco y le disparó a Joram entre los hombros. La flecha le atravesó el corazón, y Joram cayó muerto dentro de su carro.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁴ Jehú tendió su arco y disparó una flecha a Yoram, la que penetró por la espalda y le atravesó el corazón; el rey se desplomó en su carro.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁴ Pero Jehú tensó su arco, e hirió a Joram entre los hombros, y la flecha salió por el corazón, y se desplomó en su carro.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁴ Pero Jehú tensó el arco en sus manos e hirió a Jorán por la espalda. La saeta le atravesó el corazón y se desplomó en su carro.

2 Reyes 9:24 Referans Kwoze

1 Reyes 19:17

“Jehú ejecutará a quien escape de la espada de Jazael, y Eliseo ejecutará a quien escape de la espada de Jehú.

1 Reyes 21:29

“¿Has visto cómo se ha humillado Acab ante mí? Porque se ha humillado ante mí, no traeré el desastre durante su vida, sino que haré caer el desastre sobre su familia en vida de su hijo”.

1 Reyes 22:34

Sin embargo, un arquero enemigo disparó una flecha al azar, hiriendo al rey de Israel entre las junturas de su armadura, junto al peto. El rey le dijo a su auriga: “¡Da la vuelta y sácame del combate, porque me han herido!”.

1 Reyes 22:35

La batalla duró todo el día. El rey de Israel se apuntaló en su carro para enfrentarse a los arameos, pero al anochecer murió. La sangre se había derramado de su herida sobre el piso del carro.

2 Reyes 10:4

Pero ellos se asustaron mucho y se dijeron: “Si dos reyes no pudieron derrotarlo, ¿cómo podríamos nosotros?”

2 Reyes 10:9

Por la mañana Jehú salió a hablar con el pueblo que se había reunido. “Ustedes no han hecho nada malo”, les dijo. “Yo fui el que conspiró contra mi maestro y lo mató. Pero ¿quién mató a todos estos?

Salmos 50:22

Piensen otra vez, ustedes que menosprecian a Dios, o los haré trizas, y nadie podrá salvarlos.

Proverbios 21:30

Toda la sabiduría, entendimiento e instrucción que puedas lograr no son nada delante del Señor.

Zacarías 13:6

Y si alguien le pregunta: “¿Cuál es el motivo de esas heridas en tu espalda?” él responderá: “Fui herido en la casa de un amigo”.

1 Tesalonicenses 5:3

Cuando la gente hable de paz y seguridad, de repente vendrá destrucción sobre ellos. Será como el inicio repentino de los dolores de parto, y ciertamente no escaparán.