16 Entonces Ezequías quitó el oro de las puertas del templo de Jehová y de los quiciales que el mismo rey Ezequías había cubierto de oro, y lo dio al rey de Asiria.
16 Hasta quitó el oro de las puertas del templo del Señor y de los marcos de las puertas que había revestido con oro, y se lo dio todo al rey de Asiria.
16 Fue entonces cuando Ezequías rey de Judá sacó de las puertas del Templo de Yavé y de sus postes el oro con que el mismo las había cubierto, para dárselo al rey de Asur.
16 En aquel tiempo Ezequías desmanteló las puertas de la Casa de YHVH, y los soportes que había recubierto el mismo° Ezequías rey de Judá, y los entregó al rey de Asiria.
16 Fue en esta ocasión cuando Ezequías arrancó de las puertas del templo de Yahveh y de los dinteles el oro con que el rey de Judá, Ezequías, los había recubierto, y se lo entregó al rey de Asiria.
Entonces el rey Joás de Judá tomó todos los objetos sagrados dedicados por sus antepasados Josafat, Jehoram y Ocozías, los reyes de Judá, junto con todos los objetos que él mismo había dedicado, y todo el oro que se encontraba en los tesoros del Templo del Señor y del palacio real, y envió todo a Jazael, rey de Aram. Entonces Jazael se retiró de Jerusalén.
Aun así, el rey de Asiria envió a su comandante en jefe, a su oficial principal y a su general del ejército, junto con un gran ejército, desde Laquis hasta el rey Ezequías en Jerusalén. Se acercaron a Jerusalén y acamparon junto al acueducto del estanque superior, en el camino hacia donde se lava la ropa.
Ezequías recibió con alegría a los visitantes y les mostró lo que tenía en su tesoro: toda la plata, el oro, las especias y los aceites caros. También les mostró todo su arsenal y todo lo que tenía en sus almacenes. De hecho, no había nada en su palacio ni en todo su reino que Ezequías no les mostrara.