2 Crónicas 7:16 - Versión Biblia Libre

¹⁶ porque he elegido y consagrado este Templo para que se me honre allí para siempre. Siempre velaré por él y lo cuidaré, porque me importa mucho.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ porque ahora he elegido y santificado esta casa, para que esté en ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para siempre.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ Pues he elegido este templo y lo he apartado para que sea santo, un lugar donde mi nombre será honrado para siempre. Lo vigilaré sin cesar, porque es muy preciado a mi corazón.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ pues ahora he escogido y santificado esta Casa, para que en ella permanezca mi Nombre para siempre. Allí estarán mis ojos y mi corazón todos los días.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ porque ahora he escogido y santificado esta Casa, para que mi Nombre esté en ella para siempre, y mis ojos y mi corazón estén allí todos los días.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ pues ahora he elegido y santificado este templo para que mi nombre more en él por siempre, y mis ojos y mi corazón estarán en él todos los días.

2 Crónicas 7:16 Referans Kwoze

1 Reyes 8:16

‘Desde el día en que saqué a mi pueblo Israel de Egipto no he elegido ninguna ciudad de las tribus de Israel como lugar para construir un Templo en mi honor. Pero he elegido a David como rey de mi pueblo Israel’.

1 Reyes 8:35

“Si los cielos se cierran y no llueve porque tu pueblo ha pecado contra ti, si orancon su mirada hacia este lugar y si vuelven arrepentidos a ti, apartándose de su pecado porque los has castigado,

1 Reyes 8:44

“Cuando tu pueblo vaya a luchar contra sus enemigos, dondequiera que lo envíes, y cuando orenmirando hacia la ciudad que has elegido y la casa que he construido para honrarte,

1 Reyes 8:48

y vuelven a ti con total sinceridad en sus pensamientos y actitudes allí en su tierra de cautiverio; y oran mirando hacia la tierra que les diste a sus antepasados, la ciudad que elegiste y el Templo que he construido para honrarte,

1 Reyes 9:3

Y el Señor le dijo: “He escuchado tu oración y tu petición a mí. He dedicado este Templo que has construido poniendo mi nombre en él para siempre; siempre velaré por él y lo cuidaré.

2 Reyes 21:4

Levantó altares paganos en el Templo del Señor, justo donde el Señor había dicho: “Pondré mi nombre en Jerusalén para siempre”.

2 Crónicas 30:8

No sean, pues, orgullosos y obstinados como sus padres, sino entréguense al Señor y vengan a su santuario, que él ha santificado para siempre, y sirvan al Señor, su Dios, para que no caiga más sobre ustedes su feroz ira.

2 Crónicas 6:20

Que vigiles este Templo día y noche, cuidando el lugar donde dijiste que serías honrado. Que escuches la oración que tu siervo eleva hacia este lugar,

2 Crónicas 7:12

el Señor se le apareció por la noche y le dijo “He escuchado tu oración y he elegido este lugar para mí como Templo de sacrificio.

2 Crónicas 7:15

Ahora mis ojos estarán abiertos y mis oídos prestarán atención a las oraciones que se ofrezcan en este lugar,

2 Crónicas 7:17

“En cuanto a ti, si sigues mis caminos como lo hizo tu padre David, haciendo todo lo que te he dicho que hagas, y si guardas mis leyes y reglamentos,

Salmos 132:13

Porque el Señor ha escogido a Sión, y quiso hacer su trono allí, diciendo:

Salmos 132:14

“Esta siempre será mi casa; aquí es donde he de morar.

Zacarías 3:2

Y el Señor le dijo a Satanás: “El Señor te reprende, Satanás. Yo, el Señor que he escogido a Jerusalén, te reprendo. ¿Acaso no es como un carbón arrebatado de la fogata?”

Mateo 3:17

Entonces una voz desde el cielo dijo: “este es mi hijo a quien amo, el cual me complace”.

Deuteronomio 12:21

Si el lugar donde el Señor tu Dios elige está muy lejos, entonces puedes sacrificar cualquier animal del rebaño o manada que te ha dado, siguiendo los preceptos que yo te he dado, y puedes comerlo en tu ciudad cuando quieras.

Deuteronomio 16:11

Celebrarás en presencia del Señor en el lugar que él elija. Esto los incluye a ustedes, a sus hijos e hijas, a sus esclavos y esclavas, y a los levitas que viven en sus ciudades, así como a los extranjeros, huérfanos y viudas que hay entre ustedes.

Colosenses 2:9

Pues la plenitud de la naturaleza divina de Dios habita en Cristo en forma humana,