1 Reyes 7:30 - Versión Biblia Libre

³⁰ Y cada carro tenía cuatro ruedas de bronce con ejes de bronce. Un lavamanos descansaba sobre cuatro soportes que tenían coronas decorativas a cada lado.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³⁰ Cada basa tenía cuatro ruedas de bronce, con ejes de bronce, y en sus cuatro esquinas había repisas de fundición que sobresalían de los festones, para venir a quedar debajo de la fuente.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁰ Cada carreta tenía cuatro ruedas de bronce con sus ejes también de bronce. En las esquinas contaban con unos soportes para los tazones de bronce; estos soportes estaban decorados a cada lado con tallas de guirnaldas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁰ Cada sustentáculo tenía cuatro ruedas de bronce con ejes de bronce; los cuatro pies tenían patas de bronce que sostenían la pileta; estaban fundidas junto con los pies, vueltas hacia adentro.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁰ Cada base tenía cuatro ruedas de bronce con ejes de bronce, y sus cuatro patas tenían soportes debajo de la fuente, los cuales eran de bronce fundido y tenían molduras a cada lado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁰ Cada basa tenía cuatro ruedas de bronce, con sus ejes también de bronce; y en los cuatro ángulos había soportes para el aguamanil, los cuales eran de fundición, con guirnaldas en cada uno de ellos.

1 Reyes 7:30 Referans Kwoze

1 Reyes 7:29

Tanto los paneles laterales como los postes estaban decorados con leones, bueyes y querubines. Encima y debajo de los leones y los bueyes había guirnaldas decorativas.

1 Reyes 7:31

En la parte superior de cada carro había una abertura redonda a modo de pedestal para sostener el lavamanos. La abertura tenía un codo de profundidad y un codo y medio de ancho. La abertura tenía tallas a su alrededor. Los paneles del carro eran cuadrados, no redondos.

1 Reyes 7:34

Cada carretilla tenía cuatro asas, una en cada esquina, hechas como parte del soporte.

Ezequiel 10:9

Vi cuatro ruedas junto a los querubines, una rueda al lado de cada querubín. Las ruedas brillaban como el topacio.

Ezequiel 3:13

Era el ruido que hacían las alas de los seres al rozarse entre sí y el ruido que hacían las ruedas junto a ellos, un ruido realmente fuerte que sonaba como un terremoto.