1 Crónicas 22:16 - Versión Biblia Libre

¹⁶ Tienes muchos trabajadores, como canteros, albañiles, carpinteros y toda clase de artesanos del oro, la plata, el bronce y el hierro, sin límite. Así que ponte en marcha, y que el Señor te acompañe”.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ Del oro, de la plata, del bronce y del hierro, no hay cuenta. Levántate, y manos a la obra; y Jehová esté contigo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ Además, cuentas con expertos en orfebrería y platería, y trabajadores del bronce y del hierro. ¡Ahora, manos a la obra y que el Señor esté contigo!».

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ El oro, la plata, el bronce y el hierro son incalculables. Levántate, pues, manos a la obra, y que Yavé sea contigo.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ Del oro, de la plata, del bronce y del hierro, no hay cuenta. ¡Levántate, y manos a la obra, y YHVH sea contigo!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ Hay oro, plata, bronce y hierro sin cuento. Dispónte, pues, a comenzar la obra, y que Yahveh esté contigo'.

1 Crónicas 22:16 Referans Kwoze

1 Reyes 2:2

“Estoy a punto de recorrer el camino que todo el mundo debe recorrer en la tierra. Sé valiente y actúa como un hombre.

1 Reyes 7:47

Salomón no pesó nada de lo que se había hecho, porque era mucho: no se podía medir el peso del bronce utilizado.

1 Crónicas 22:11

“Ahora, hijo mío, que el Señor te acompañe para que logres construir la casa del Señor, tu Dios, tal como él dijo que lo harías.

1 Crónicas 22:14

“Mira, me he tomado muchas molestias para proveer la casa del Señor: 100.000 talentos de oro, 1.000.000 de talentos de plata, y bronce y hierro, más de lo que se puede pesar.

1 Crónicas 22:15

También he proporcionado madera y piedra, pero tendrás que añadir más.

1 Crónicas 22:3

David proporcionó mucho hierro para hacer los clavos de las puertas de entrada y de los soportes, así como más bronce del que se podía pesar.

1 Crónicas 28:10

Presta atención ahora, porque el Señor te ha elegido para construir una casa para el santuario. Sé fuerte y haz el trabajo’”.

1 Crónicas 29:2

Con todos mis medios he provisto para la casa de mi Dios: oro para los artículos de oro, plata para la plata, bronce para el bronce, hierro para el hierro y madera para la madera; piedras de ónice y piedras para los engastes: turquesa, piedras de diferentes colores, toda clase de piedras preciosas; y mucho mármol.

2 Crónicas 1:1

Salomón, hijo de David, fortaleció su dominio sobre el reino, y el Señor Dios estuvo con él y lo hizo sumamente poderoso.

2 Crónicas 20:17

Pero no es necesario que luches en esta batalla. Sólo quédense quietos y observen la victoria del Señor. Él está contigo, Judá y Jerusalén. ¡No tengan miedo ni se desanimen! Marchen a enfrentarlos, porque el Señor está con ustedes”.

1 Corintios 15:58

Así que, mis queridos hermanos y hermanas: sean fuertes, permanezcan firmes, haciendo todo lo que puedan por la obra del Señor, pues saben que ninguna cosa que hagan por él es en vano.

Efesios 5:14

Por eso se dice: “Levántense, ustedes los que duermen, levántense de entre los muertos, y Cristo brillará sobre ustedes”.

Filipenses 4:13

¡Todo lo puedo en Cristo, porque él me fortalece!

Josué 1:2

“Mi siervo Moisés ha muerto. Así que ve y cruza el Jordán, tú y todo el pueblo, y entren en el país que yo le entrego a los israelitas.

Josué 1:5

Nadie podrá enfrentarse a ti mientras vivas. Tal como lo hice con Moisés, estaré contigo. Nunca te dejaré y nunca te abandonaré.

Josué 1:9

No te olvides lo que te dije: ¡Sé fuerte! ¡Sé valiente! ¡No tengas miedo! ¡No te desanimes! Porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas”.

Josué 7:10

Pero el Señor le respondió a Josué: “¡Levántate! ¿Qué crees que haces acostado sobre tu rostro de esa manera?

Jueces 4:14

Entonces Débora le dijo a Barac: “¡Ponte en marcha! Hoy el Señor te ha entregado a Sísara. ¿No marchó el Señor delante de ti?” Entonces Barac bajó del monte Tabor, acompañado de diez mil hombres.

1 Samuel 17:37

David concluyó: “El Señor, que me salvó de las garras del león y del oso, y del mismo modo me salvará de este filisteo”. “Ve, y que el Señor esté contigo”, respondió Saúl.

1 Samuel 20:13

Pero si mi padre planea hacerte daño, que el Señor me castigue muy severamente, si no te lo hago saber enviándote un mensaje para que puedas salir a salvo. Que el Señor esté contigo, como lo estuvo con mi padre.