Marcos 10:40 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

⁴⁰ pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me corresponde concederlo, Dios ya tiene preparados esos puestos para los que Él decidió.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴⁰ pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴⁰ pero no me corresponde a mí decir quién se sentará a mi derecha o a mi izquierda. Dios preparó esos lugares para quienes él ha escogido.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴⁰ pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me corresponde a mí el concederlo; eso ha sido preparado para otros.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴⁰ pero el sentarse a mi derecha o izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes° ha sido preparado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴⁰ Pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no es cosa mía el concederlo; eso es para aquellos a quienes está reservado'.

Marcos 10:40 Referans Kwoze

Mateo 13:11

Él respondió: – Porque a ustedes, que son mis discípulos, se les ha dado a conocer íntimamente los misterios del reino de los cielos, mas ellos no tuvieron la misma oportunidad.

Mateo 20:23

Jesús contestó: – A la verdad, mi copa la podrían beber, pero sentarse a mi derecha o a mi izquierda, eso no lo puedo conceder, eso le corresponde a mi Padre, Él es el que ha decidido quienes podrán sentarse al lado mío.

Mateo 25:34

Entonces el rey dirá a los que están a su derecha: “Vengan benditos de mi Padre, hereden el reino que había sido preparado para ustedes antes de la fundación del mundo.

Juan 17:2

le diste a tu Hijo autoridad sobre toda carne, para que Él regale la vida eterna a todos los que Tú le diste.

Juan 17:24

Padre, deseo de todo corazón que donde yo esté, estén conmigo los creyentes que me diste, para que ellos vean mi gloria, la misma gloria que Tú me diste, ya que Tú me amaste antes de la creación del mundo.

Hechos 1:7

Jesús les contestó: – No les compete a ustedes conocer el tiempo de Dios, que el Padre dispuso con su propia autoridad;

Hebreos 11:16

pero ellos aspiraban a una patria mejor, un hogar celestial. Por eso, Dios no se avergonzó de ser su Dios y les preparó una ciudad.