Sin embargo, no me importa si tengo que sacrificar mi propia vida, ya que mi gran objetivo es terminar mi carrera y cumplir satisfactoriamente con el ministerio que recibí del Señor Jesús, que es testificar solemnemente el Evangelio que transforma toda la existencia humana y es producto de la gracia de Dios.
Hasta parece que, por la causa de Cristo, nosotros nos hemos convertido en tontos, mientras que ustedes se volvieron los sabios; nosotros somos débiles, pero ustedes son los fuertes; a ustedes los honran y a nosotros nos desprecian.
Me siento feliz de gastar todo lo que tengo, incluso a mí mismo, para ayudarlos integralmente. ¿Será que cuanto más los quiero, menos me quieren ustedes?
Pues nosotros los que vivimos, siempre estamos expuestos a la muerte por causa de Jesús, para que también su vida se manifieste plenamente en nuestra carne mortal.
pues por causa de la obra de Cristo, estuvo al borde de la muerte, puso su vida para ayudarme en nombre de ustedes, ya que no podían darme esta ayuda personalmente.
Sabemos lo que es el amor sacrificial de Dios en Cristo, porque Él dio su vida por nosotros, por lo tanto, el que ama de verdad, imita a Jesucristo y da su vida en favor de los demás, dejando de ser para que el otro sea.