Proverbios 26:4 - Palabra de Dios para ti 2022

⁴ No respondas al necio según su necedad, Para que no seas tú como él.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, Para que no seas tú también como él.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ No respondas a los argumentos absurdos de los necios o te volverás tan necio como ellos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ No respondas a las estupideces de un imbécil, te volverías como él.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ No respondas al necio según su necedad, No sea que te iguales a él.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ No respondas al necio según su necedad, no sea que tú mismo te iguales a él.

Proverbios 26:4 Referans Kwoze

1 Reyes 12:14

Siguió el consejo de los jóvenes y les habló: Mi padre les impuso su pesado yugo, pero yo lo impondré aun más pesado. Mi padre los castigó con azotes, pero yo los castigaré con escorpiones.

1 Reyes 12:16

Cuando todo Israel vio que el rey no los escuchó, el pueblo le respondió al rey: ¿Qué parte tenemos nosotros con David? ¡No tenemos heredad con el hijo de Isaí! ¡Israel, a tus tiendas! ¡Ahora ten cuidado de tu propia casa, David! E Israel fue a sus tiendas.

Proverbios 17:14

El que comienza una contienda suelta las aguas. Desiste, pues, antes que estalle el pleito.

Proverbios 23:9

No hables a oídos del insensato, Porque despreciará la prudencia de tus razones.

Proverbios 26:5

Responde al necio como merece su necedad, Para que él no se estime sabio.

Proverbios 29:9

Si un sabio contiende con un necio, Aunque se enoje éste o se ría, no tendrá reposo.

Isaías 36:21

Pero ellos callaron y no respondieron ni una palabra, porque la orden del rey decía: No le respondan.

Mateo 7:6

No den lo santo a los perros ni echen sus perlas a los cerdos, no sea que las pisoteen, se lancen contra ustedes y los despedacen.

1 Pedro 3:9

No devuelvan mal por mal, ni maldición por maldición. Al contrario, bendigan, pues fueron llamados para heredar bendición.

Judas 1:9

Pero cuando el arcángel Miguel, al contender con el diablo para expresarse con respecto al cuerpo de Moisés, no se atrevió a pronunciar juicio de maldición, sino dijo: ¡El Señor te reprenda!