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Lucas 18:39 - Palabra de Dios para ti 2022

39 Y los que iban delante lo reprendían para que callara. Pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!

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Biblia Reina Valera 1960

39 Y los que iban delante le reprendían para que callase; pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!

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Biblia Nueva Traducción Viviente

39 «¡Cállate!», le gritaba la gente que estaba más adelante. Sin embargo, él gritó aún más fuerte: «¡Hijo de David, ten compasión de mí!».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

39 Los que iban delante le levantaron la voz para que se callara, pero él gritaba con más fuerza: '¡Jesús, hijo de David, ten compasión de mí!'

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La Biblia Textual 3a Edicion

39 Y los que iban° delante lo reprendían para que callara; pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

39 Los que iban delante le reprendían para que callara; pero él gritaba todavía más fuerte: '¡Hijo de David, ten compasión de mí!'.

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Lucas 18:39
16 Referans Kwoze  

¡Oh Yavé, a Ti clamo, apresúrate hacia mí! Presta oído a mi voz cuando te invoco.


Pidan y se les dará. Busquen y hallarán. Llamen a la puerta y se les abrirá.


Les respondió: ¡Hombres de poca fe! ¿Por qué temen? Se levantó, reprendió a los vientos y al mar, y se produjo una gran calma.


Cuando Jesús salió de allí, lo siguieron dos ciegos que gritaban: ¡Hijo de David, ten misericordia de nosotros!


¡Ay de ustedes, los doctores de la Ley, porque quitaron la llave del conocimiento! Ustedes no entraron e impidieron a los que querían entrar.


Les narró también una parábola con respecto a la necesidad de hablar ellos siempre con Dios y no desmayar:


Le presentaban también los niños para que los tocara. Al ver esto, los discípulos los reprendían.


Entonces gritó: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!


Entonces Jesús se detuvo y pidió que se lo trajeran. Cuando se acercó, le preguntó:


Algunos fariseos le reclamaron: Maestro, reprende a tus discípulos.


Mientras Él aún hablaba, apareció uno de parte del oficial de la congregación quien dijo: Tu hija murió. Ya no molestes al Maestro.


Por esto, tres veces imploré al Señor que lo alejara de mí.


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