Levítico 11:40 - Palabra de Dios para ti 2022

⁴⁰ El que coma de su cadáver lavará sus ropas y será impuro hasta llegar la noche. El que recoja el cadáver lavará sus ropas, y será impuro hasta llegar la noche.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴⁰ Y el que comiere del cuerpo muerto, lavará sus vestidos y será inmundo hasta la noche; asimismo el que sacare el cuerpo muerto, lavará sus vestidos y será inmundo hasta la noche.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴⁰ Si come de su carne o se lleva el cadáver, deberá lavar su ropa y permanecerá contaminada hasta el anochecer.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴⁰ El que coma de su cadáver deberá lavar sus vestidos y quedará impuro hasta la tarde; el que levante un cadáver habrá de lavar sus vestidos y quedará impuro hasta la tarde.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴⁰ El que coma de su cadáver lavará sus vestidos, y será impuro hasta la tarde, y el que recoja el cadáver lavará sus vestidos, y será impuro hasta la tarde.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴⁰ El que coma su carne lavará sus vestidos y quedará impuro hasta la tarde; el que transporte su cadáver lavará sus vestidos y quedará impuro hasta la tarde.

Levítico 11:40 Referans Kwoze

Éxodo 22:31

Me serán hombres santos. No comerán carne despedazada en el campo. La echarán a los perros.

Isaías 1:16

Lávense, purifíquense, y quiten de mi vista la maldad de sus obras. Dejen de hacer el mal.

Ezequiel 36:25

Entonces rociaré agua limpia sobre ustedes, y serán purificados de todas sus impurezas. Los purificaré de todos sus ídolos.

Ezequiel 4:14

Y dije: ¡Ay, ʼAdonay Yavé! En verdad, nunca fui contaminado. Desde mi juventud hasta ahora, no comí cosa mortecina ni despedazada por las fieras, ni entró en mi boca carne repugnante.

Ezequiel 44:31

Los sacerdotes no comerán algún animal mortecino o destrozado, sean aves o cuadrúpedos.

Levítico 11:25

Cualquiera que lleve alguna parte de sus cadáveres, lavará sus ropas y quedará impuro hasta llegar la noche.

Levítico 11:28

El que recoja sus cadáveres se lavará la ropa, y será impuro hasta llegar la noche. Serán impuros para ustedes.

Levítico 11:39

Si muere cualquier animal del cual pueden comer, el que toque su cadáver será impuro hasta llegar la noche.

Levítico 14:46

El que entre en la casa durante los días cuando estuvo cerrada será impuro hasta llegar la noche.

Levítico 15:15

El sacerdote los ofrecerá, el uno como sacrificio por el pecado y el otro como holocausto. Así el sacerdote hará sacrificio que apacigua por él delante de Yavé a causa de su flujo.

Levítico 15:27

Cualquiera que toque estas cosas quedará impuro. Tendrá que lavar sus ropas y lavarse con agua, y quedará impuro hasta llegar la noche.

Levítico 16:26

Con respecto al que llevó el macho cabrío a Azazel, lavará sus ropas y su cuerpo con agua, tras lo cual podrá entrar en el campamento.

Levítico 16:28

El que los queme lavará sus ropas y lavará su cuerpo con agua, tras lo cual podrá entrar en el campamento.

Levítico 22:6

La persona que lo toque será impura hasta llegar la noche, y no comerá de las cosas santas hasta que haya lavado su cuerpo con agua.

Levítico 22:8

Nada mortecino ni despedazado por fiera comerá, porque será contaminado por ello. Yo, Yavé.

Zacarías 13:1

Aquel día habrá un manantial abierto para la casa de David y los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado y de la impureza.

Números 19:19

El tercero y el séptimo día, el que está purificado rociará al impuro. Cuando lo haya purificado el séptimo día, lavará sus ropas y se lavará en agua. Al llegar la noche quedará purificado.

1 Corintios 10:21

No pueden beber la copa del Señor y la copa de los demonios, ni pueden comer la mesa del Señor y la mesa de demonios.

1 Corintios 6:11

Esto eran algunos de ustedes. Pero fueron lavados, santificados y declarados justos en el Nombre del Señor Jesucristo y por el Espíritu de nuestro Dios.

Deuteronomio 14:21

Ningún animal mortecino comerán. Lo podrás dar al extranjero que está en tus ciudades. Él podrá comerlo o venderlo al extranjero. Porque tú eres un pueblo santo para Yavé tu ʼElohim. No cocinarás el cabrito en la leche de su madre.

1 Juan 1:7

Pero cuando andemos en la Luz, como Él está en la Luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesús su Hijo nos limpia de todo pecado.