Juan 17:26 - Palabra de Dios para ti 2022

²⁶ Les di a conocer y les daré a conocer tu Nombre, para que el amor con el cual Tú me amaste esté en ellos, y Yo en ellos.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁶ Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁶ Yo te he dado a conocer a ellos y seguiré haciéndolo. Entonces tu amor por mí estará en ellos, y yo también estaré en ellos».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁶ Yo les he dado a conocer tu Nombre y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que tú me amas esté en ellos y también yo esté en ellos.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁶ Y les di a conocer tu nombre, y lo daré a conocer, para que el amor con que me amaste esté en ellos, y Yo en ellos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁶ Les he revelado tu nombre, y se lo seguiré revelando, para que el amor con que me has amado esté con ellos, y en ellos también yo.'

Juan 17:26 Referans Kwoze

Salmos 22:22

Anunciaré tu Nombre a mis hermanos. En medio de la congregación te alabaré.

Juan 14:20

Aquel día sabrán que Yo estoy en mi Padre, ustedes en Mí y Yo en ustedes.

Juan 14:23

Jesús le respondió: Si alguno me ama, guardará mi Palabra. Mi Padre lo amará. Vendremos a él y viviremos con él.

Juan 15:15

Ya no los llamo esclavos, porque el esclavo no sabe lo que su señor hace. Pero los llamo amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, se las revelé.

Juan 15:4

Permanezcan en Mí, y Yo en ustedes. Como la rama no puede dar fruto por ella misma, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en Mí.

Juan 15:9

Como el Padre me amó, también Yo los amé. Permanezcan en mi amor.

Juan 17:23

Yo en ellos y Tú en Mí, para que sean perfeccionados en uno, para que el mundo sepa que Tú me enviaste, y los amaste como me amaste a Mí.

Juan 17:6

Manifesté tu Nombre a los hombres que me diste del mundo. Tuyos eran y me los diste. Y han guardado tu Palabra.

Juan 17:8

porque les he hablado las Palabras que me diste. Ellos las recibieron, entendieron que verdaderamente salí de Ti y creyeron que Tú me enviaste.

Juan 6:56

El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en Mí, y Yo en él.

Juan 8:50

Pero Yo no busco mi gloria. Hay Uno que la busca y juzga.

Romanos 8:10

Pero si Cristo está en ustedes, el cuerpo en verdad está muerto por causa del pecado, pero el espíritu vive por causa de la justicia.

1 Corintios 1:30

Pero por Él ustedes están en Cristo Jesús, a Quien Dios nos ofreció como sabiduría, justificación, santificación y redención,

1 Corintios 12:12

Porque así como el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, pero todos los miembros, aunque son muchos, son un solo cuerpo, así también es el cuerpo de Cristo.

Gálatas 2:20

y ya no vivo yo, sino Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo en la fe en el Hijo de Dios, Quien me amó y se entregó por mí.

Efesios 1:6

para la alabanza de la gloria de su gracia que nos favoreció altamente en el Amado.

Efesios 3:17

para que Cristo resida por medio de la fe en los corazones de ustedes, a fin de que, arraigados y fortalecidos en amor,

Efesios 5:30

porque somos miembros de su cuerpo.

Efesios 5:32

Este misterio es grande, pero yo digo esto respecto a Cristo y a la iglesia.

Colosenses 1:27

a quienes Dios quiso declarar cuál es la riqueza de la gloria de este misterio entre los gentiles: que Cristo es en ustedes la esperanza de gloria,

Colosenses 2:10

Ustedes están completos en Él, Quien es la Cabeza de todo principado y jurisdicción.

Colosenses 3:11

Aquí no hay distinción entre griego y judío, circuncisión e incircuncisión, bárbaro, escita, esclavo y libre, sino Cristo es todo en todos.

2 Tesalonicenses 2:16

El mismo Señor nuestro, Jesucristo, y Dios nuestro Padre, Quien nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia,

Hebreos 2:12

cuando dijo: Anunciaré tu Nombre a mis hermanos. En medio de la congregación te cantaré alabanza.

1 Juan 3:24

El que guarda sus Mandamientos, permanece en Él, y Él en aquél. En esto sabemos que permanece en nosotros: porque nos dio el Espíritu.