Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jeremías 39:8 - Palabra de Dios para ti 2022

8 Los caldeos destruyeron con fuego la casa del rey y las casas del pueblo, y derribaron los muros de Jerusalén.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 Y los caldeos pusieron a fuego la casa del rey y las casas del pueblo, y derribaron los muros de Jerusalén.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Mientras tanto, los babilonios quemaron Jerusalén, incluidos el palacio real y las casas del pueblo, y derribaron las murallas de la ciudad.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Los caldeos incendiaron el palacio real y las casas del pueblo, y demolieron las murallas de Jerusalén.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Y los caldeos quemaron a fuego la casa del rey y las casas del pueblo, y derribaron los muros de Jerusalem.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Los caldeos prendieron fuego al palacio real y a las casas de la población y derribaron las murallas de Jerusalén.

Gade chapit la Kopi




Jeremías 39:8
25 Referans Kwoze  

A los siete días del mes quinto del año 19 de Nabucodonosor, rey de Babilonia, llegó a Jerusalén Nabuzaradán, el capitán de la guardia, esclavo del rey de Babilonia,


Quemaron la Casa de ʼElohim y destruyeron el muro de Jerusalén. Incendiaron todos los edificios fortificados y destruyeron todos los objetos valiosos que había en ella.


Me dijeron: Los del remanente que quedan de la cautividad allí en la provincia están en gran angustia y humillación. El muro de Jerusalén está lleno de brechas y sus puertas fueron devastadas por el fuego.


Porque devoraron a Jacob, Y desolaron su morada.


Yavé de las huestes dijo a mis oídos: Sus muchas casas serán arrasadas. Sus magníficos palacios quedarán desolados.


Pero si no me escuchan para santificar el día sábado y no llevar una carga ni introducirla por las puertas de Jerusalén el día sábado, Yo encenderé un fuego en sus puertas que devorará los palacios de Jerusalén y no será apagado.


Porque levanté mi rostro contra esta ciudad para mal y no para bien, dice Yavé. Será entregada en mano del rey de Babilonia, quien la destruirá con fuego.


Los caldeos que atacan esta ciudad entrarán y la incendiarán. La quemarán, como las casas en cuyas azoteas ofrecían incienso a baal y derramaban libaciones a ʼelohim extraños para provocarme a ira.


Yavé ʼElohim de Israel dice: Vé y habla a Sedequías, rey de Judá: Yavé dice: Yo entrego esta ciudad al rey de Babilonia para que la incendie.


Ciertamente Yo daré orden, dice Yavé, y los devolveré a esta ciudad. Lucharán contra ella, la tomarán y la incendiarán. Convertiré en una desolación las ciudades de Judá hasta que no quede habitante.


Porque aun si ustedes hubieran derrotado a todo el ejército de los caldeos que luchaba contra ustedes, y hubieran dejado hombres heridos entre ustedes, cada uno en su tienda, estos se levantarían y consumirían con fuego esta ciudad.


Pero si no te entregas a los oficiales del rey de Babilonia, esta ciudad será entregada en la mano de los caldeos. La incendiarán, y tú no escaparás de sus manos.


Suban a las terrazas de su viña y destruyan, pero no la destruyan por completo. Quiten sus ramas, porque no son de Yavé.


Por tanto, ʼAdonay Yavé dice: Ciertamente mi ira y mi ardiente furor serán derramados sobre este lugar, hombres y bestias, los árboles del campo y el fruto de la tierra. Arderá y no será extinguido.


El adversario extendió su mano Sobre todos sus tesoros. Porque ella vio entrar a los gentiles en su Santuario, Aquellos a quienes diste orden de no entrar en tu congregación.


ʼAdonay destruyó sin compasión todas las moradas de Jacob. Derribó en su indignación las fortalezas de la hija de Judá. Las echó a tierra. Profanó el reino y a sus magistrados.


ʼAdonay repudió su altar. Abandonó su Santuario. Entregó los muros de sus palacios en manos del enemigo. Ellos producen un ruido en la Casa de Yavé Como en los días de fiesta señalada.


Destruirán tus casas con fuego. Ejecutarán juicios sobre ti a la vista de muchas mujeres. Entonces detendré tu prostitución. Tampoco volverás a pagar a tus amantes.


La turba las lapidará y las cortará con sus espadas. Matarán a sus hijos y a sus hijas, y consumirán sus casas con fuego.


El año duodécimo de nuestro cautiverio, el mes décimo, a los cinco días del mes, aconteció que vino a mí uno que escapó de Jerusalén, y me dijo: ¡La ciudad fue capturada!


Encenderé fuego en Judá, que devorará los palacios de Jerusalén.


Por tanto, por causa de ustedes, Sion será arada como un campo, Jerusalén será una pila de ruinas, y la Montaña del Templo como colinas de escaso bosque.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite