Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jeremías 1:16 - Palabra de Dios para ti 2022

16 Pronunciaré mis sentencias contra ellos a causa de toda su perversidad, porque me abandonaron, quemaron incienso a ʼelohim extraños y se postraron ante las obras de sus propias manos.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

16 Y a causa de toda su maldad, proferiré mis juicios contra los que me dejaron, e incensaron a dioses extraños, y la obra de sus manos adoraron.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Pronunciaré juicio contra mi pueblo a causa de toda su maldad, por haberme abandonado y por quemar incienso a otros dioses. ¡Sí, ellos rinden culto a ídolos que hicieron con sus propias manos!

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Voy a hacer justicia con este pueblo que me ha dejado para hacer el mal; ha quemado incienso a dioses extranjeros, y se ha puesto a servir a dioses que ellos mismos se fabricaron.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

16 Y pronunciaré mis sentencias contra ellos a causa de toda su maldad, porque me abandonaron, quemaron incienso a dioses extraños y se postraron ante las obras de sus propias manos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Pronunciaré mis sentencias contra ellos por toda su maldad, pues me abandonaron, incensaron a dioses extraños y adoraron las obras de sus manos.

Gade chapit la Kopi




Jeremías 1:16
44 Referans Kwoze  

porque me abandonaron y quemaron incienso a otros ʼelohim para provocarme a ira con toda la obra de sus manos. Así pues, mi ira se encendió contra este lugar y no será apagada.


quien salió al encuentro de Asa y le dijo: Escúchenme, Asa y todo Judá y Benjamín: Yavé está con ustedes, si ustedes están con Él. Si lo buscan, será hallado por ustedes, pero si lo abandonan, Él los abandonará.


Anduvo en los caminos de los reyes de Israel e hizo imágenes de fundición de los baales.


por cuanto me abandonaron y quemaron incienso a otros ʼelohim, para provocarme a ira con todas las obras de sus manos. Por eso mi ira se derramará contra este lugar, y no será extinguida.


Pero si ustedes se apartan y abandonan mis Estatutos y mis Mandamientos que puse ante ustedes, sirven a otros ʼelohim y se postran ante ellos,


Su tierra también está llena de ídolos. Se postran ante la obra de sus manos, ante lo que hicieron sus dedos.


Echaron sus ʼelohim al fuego, porque no son ʼElohim, sino obra de manos de hombre, de madera y de piedra. Por eso fueron destruidos.


Luego se sirve de ellos como leña y toma de ellos para calentarse. También enciende el horno y hornea panes. Además hace un ʼel y lo adora. Fabrica una imagen de talla y se postra ante ella.


Pueblo que en mi propio rostro me provoca a ira continuamente, que sacrifica en huertos y quema incienso sobre ladrillos,


Obras vanas y ridículas, que perecerán en el tiempo de su castigo.


Porque las costumbres de los pueblos son vanidad. Cortan un árbol del bosque, la mano de un artífice lo labra con azuela,


Entonces las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén irán y clamarán a los ʼelohim a los cuales quemaban incienso, pero ellos ciertamente no los podrán salvar en el tiempo de su aflicción.


Yavé de las huestes, Quien te plantó, decretó una aflicción contra ti, a causa de la maldad que hicieron la Casa de Israel y la Casa de Judá, pues me provocaron a ira al quemar incienso a baal.


Tú me abandonaste, te devolviste, dice Yavé. Por tanto, Yo extiendo mi mano contra ti y te destruiré. Estoy cansado de compadecerme.


Entonces les dirás: Porque sus antepasados me abandonaron, dice Yavé, fueron tras otros ʼelohim, se postraron ante ellos y les sirvieron. Pero a Mí me abandonaron y no observaron mi Ley.


Oh Yavé, Esperanza de Israel, los que te abandonan serán avergonzados. Todos los que se apartan de Ti serán inscritos en el polvo, porque abandonaron a Yavé, Fuente de agua viva.


Pues mi pueblo me olvidó. Ofrece incienso a lo que no tiene valor. Tropezó en sus caminos, en las sendas antiguas. Camina por senderos, y no por la calzada.


Porque me abandonaron y enajenaron este lugar. Ofrecieron en él incienso a otros ʼelohim que ellos no conocieron, ni sus antepasados, ni los reyes de Judá. Llenaron este lugar de sangre de inocentes.


Porque mi pueblo hizo dos males: Me abandonaron a Mí, fuente de aguas vivas, y cavaron para ellos cisternas rotas que no retienen el agua.


¿No te sucedió todo esto porque abandonaste a Yavé tu ʼElohim cuando Él te guiaba por el camino?


Tus propias perversidades te castigarán, y tus apostasías te reprenderán. Por tanto, reconoce cuán malo y amargo es que hayas abandonado a Yavé tu ʼElohim, y que el temor a Mí no está en ti, dice Yavé de las huestes.


Pero, ¿dónde están los ʼelohim que te hiciste? Que se levanten y te salven ellos en el tiempo de tu aflicción. Pues como el número de tus ciudades, oh Judá, así fue el número de tus ʼelohim.


Un viento aun más fuerte vendrá a Mí, y ahora Yo pronunciaré mis juicios contra ellos.


Por eso se enluta la tierra y se oscurecen los cielos arriba. Pues hablé, lo pensé. No cambiaré de parecer ni desistiré de ello.


Al contrario, cumpliremos ciertamente toda palabra salida de nuestra boca con respecto a quemar incienso a la Reina del Cielo, y derramarle libaciones a ella, como hicimos nosotros y nuestros antepasados, nuestros reyes y nuestros magistrados en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, con lo cual tuvimos abundancia de pan. Éramos felices y no veíamos algún mal.


¿Y no voy a castigar Yo estas cosas? dice Yavé. ¿De una nación como ésta no se vengará mi alma?


¿No debo castigar estas cosas? dice Yavé. ¿No debo vengarme de una nación como ésta?


Todo hombre se embrutece por falta de conocimiento. Todo orfebre se avergüenza de su ídolo porque sus ídolos de fundición son un engaño, y no hay aliento en ellos.


¿No ves lo que hacen éstos en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén?


Los hijos recogen la leña, los padres encienden fuego, las mujeres preparan la masa para hacer tortas en honor a la reina del cielo, y dan ofrendas a ʼelohim extraños para provocarme a ira.


Roban, asesinan, adulteran, juran en falso, queman incienso a baal y andan tras otros ʼelohim que no conocieron.


Tomaste tus ropas bordadas y los cubriste con ellas. Pusiste mi aceite y mi incienso delante de ellos.


Yo, Yavé, hablé. Se cumplirá. Yo lo cumpliré. No retrocederé ni me compadeceré ni me pesará. Te juzgarán según tu conducta y según tus obras, dice ʼAdonay Yavé.


Cuanto más los llamaba, tanto más se alejaban de mi Presencia. Continuaban los sacrificios a los baales y quemaban incienso a los ídolos.


Porque de Israel es aun esto. El artífice lo hizo, no es ʼElohim. ¡Será destrozado el becerro de Samaria!


Yavé da su voz ante su ejército. Su campamento es muy grande, poderoso el que ejecuta su Palabra. ¡Porque grande y terrible es el día de Yavé! ¿Quién lo podrá soportar?


En aquellos días hicieron un becerro, ofrecieron sacrificio al ídolo y se regocijaron en las obras de sus manos.


Yavé enviará contra ti maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pongas la mano y hagas, hasta que seas destruido y perezcas pronto, a causa de la maldad de tus obras por las cuales me dejaste.


Yavé dijo a Moisés: Mira, tú vas a dormir con tus antepasados. Este pueblo se levantará y se prostituirá al seguir a ʼelohim extraños de la tierra a donde van. Me abandonará y quebrantará el Pacto que hice con ellos.


Cuando abandonen a Yavé para servir a ʼelohim extraños, Él se volverá y les hará el mal. Los consumirá, después del bien que les hizo.


El resto de los hombres, los que no murieron por estas plagas, no cambiaron de mente con respecto a las obras de sus manos para no adorar a los demonios y a los ídolos de oro, plata, bronce, piedra y madera, los cuales no pueden ver, ni oír, ni andar.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite