Gálatas 1:12 - Palabra de Dios para ti 2022

¹² pues yo no las recibí ni fui enseñado por un ser humano, sino por una revelación de Jesucristo.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹² pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² No recibí mi mensaje de ninguna fuente humana ni nadie me lo enseñó. En cambio, lo recibí por revelación directa de Jesucristo.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² No lo he recibido de un hombre, ni me fue enseñado, sino que lo recibí por una revelación de Cristo Jesús.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² pues yo no lo recibí ni lo aprendí de hombre, sino por revelación de Jesús el Mesías.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² pues yo no lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.

Gálatas 1:12 Referans Kwoze

1 Corintios 11:23

Porque yo recibí del Señor lo mismo que les enseñé: Que el Señor Jesús, la noche cuando fue entregado, tomó pan,

1 Corintios 2:10

Pero Dios nos las reveló por medio del Espíritu, porque el Espíritu escudriña todas las cosas, aun las profundidades de Dios.

2 Corintios 10:7

Ustedes miran las cosas según la apariencia. Si alguno cree que es de Cristo, razone que así como él es de Cristo, así también nosotros.

2 Corintios 12:1

Exaltarse es necesario, aunque no es provechoso. Recurriré a las visiones y revelaciones del Señor.

Gálatas 1:1

Pablo, un apóstol no por hombres ni por medio de hombre, sino por medio de Jesucristo y de Dios Padre, Quien lo resucitó de entre los muertos,

Gálatas 1:16

revelar a su Hijo en mí para que lo proclame entre los gentiles, no consulté inmediatamente a seres humanos,

Gálatas 2:2

Subí según una revelación. Para no correr ni haber corrido en vano, expuse en privado a los de cierta reputación las Buenas Noticias que predico entre los gentiles.

Efesios 3:3

Por medio de una revelación me fue dado a conocer el misterio, como antes escribí en breve.

1 Tesalonicenses 4:15

Les decimos esto en Palabra del Señor: Nosotros los que vivamos, los que seamos dejados atrás hasta la venida del Señor, ¡que de ningún modo precedamos a los que durmieron!