Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Esdras 9:6 - Palabra de Dios para ti 2022

6 y le dije: ¡Oh ʼElohim mío, estoy confuso y avergonzado para elevar mi rostro ante Ti, ʼElohim mío, porque nuestras iniquidades se multiplicaron por encima de nuestra cabeza y nuestros delitos crecieron hasta el cielo!

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

6 y dije: Dios mío, confuso y avergonzado estoy para levantar, oh Dios mío, mi rostro a ti, porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestra cabeza, y nuestros delitos han crecido hasta el cielo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Hice la siguiente oración: «Oh Dios mío, estoy totalmente avergonzado; me da vergüenza elevar mi rostro a ti. Pues nuestros pecados se han amontonado tanto que son más altos que nosotros, y nuestra culpa llega a los cielos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 y le dije: 'Estoy tan avergonzado y confundido que no me atrevo a levantar mi cara hacia ti, Dios mío. Nuestras faltas se han acumulado de tal forma que han sobrepasado nuestras cabezas, y nuestro pecado ha subido hasta el Cielo.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

6 y le dije: ¡Oh Dios mío, estoy confuso y avergonzado para elevar mi rostro ante ti, Dios mío, porque nuestras iniquidades se han multiplicado por encima de nuestra cabeza y nuestros delitos han crecido hasta los cielos!

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 y dije: '¡Dios mío! Me siento avergonzado y confuso al levantar, oh Dios mío, mi rostro hacia ti. Porque nuestras iniquidades se han multiplicado hasta por encima de nuestras cabezas, y nuestro pecado ha crecido hasta el cielo.

Gade chapit la Kopi




Esdras 9:6
27 Referans Kwoze  

Pero la gente de Sodoma era muy perversa y pecadora contra Yavé.


si en la tierra a donde fueron llevados cautivos, ellos reflexionan, se vuelven y te suplican: Pecamos, cometimos iniquidad, actuamos impíamente;


Pero había allí un profeta de Yavé llamado Oded, quien salió al encuentro del ejército que regresaba a Samaria y les dijo: Ciertamente a causa de que Yavé el ʼElohim de los antepasados de ustedes estaba airado contra Judá, los entregó en su mano, pero ustedes los mataron con una ira que llegó hasta los cielos.


Pero después de todo lo que nos sobrevino por causa de nuestras malas obras y por nuestro gran pecado, ya que Tú, ʼElohim nuestro, no nos castigaste según nuestras iniquidades y nos diste un remanente como éste,


¡Oh Yavé, ʼElohim de Israel! Tú eres justo, porque nos quedó un remanente hasta hoy. Aquí estamos en tu Presencia, a pesar de nuestros delitos, porque nadie puede estar en pie delante de Ti a causa de esto.


Esté ahora atento tu oído y tus ojos abiertos, para escuchar la oración de tu esclavo, que hago día y noche ante Ti por los hijos de Israel, tus esclavos, y confieso los pecados de los hijos de Israel que cometimos contra Ti. ¡Sí, yo y la casa de mi padre pecamos!


Ciertamente, soy insignificante. ¿Qué puedo responderte? Pongo mi mano sobre mi boca.


me aborrezco, me arrepiento y me echo en polvo y ceniza.


Porque mis iniquidades sobrepasan mi cabeza, Y como pesada carga se agravan sobre mí.


Mis heridas hieden y supuran por causa de mi locura.


Moisés volvió a Yavé y le dijo: ¡Ay, este pueblo cometió un gran pecado: hizo un ʼelohim de oro para él mismo!


Vengan luego y razonemos juntos, dice Yavé. Aunque sus pecados sean como la grana, como la nieve serán emblanquecidos. Aunque sean rojos como el carmesí, serán como lana blanca.


Porque nuestras transgresiones se multiplicaron delante de Ti. Nuestros pecados testifican contra nosotros, porque nuestras transgresiones permanecen con nosotros. Reconocemos nuestras iniquidades.


Por tanto, las lluvias fueron retenidas, no hubo lluvias tardías. Sin embargo, tuviste el descaro de prostituta. Te negaste a avergonzarte.


Porque después que me desvié, me arrepentí. Y después de ser instruido, me di un golpe en el muslo. Me avergoncé y también me humillé a causa de la afrenta de mi juventud.


Quisimos sanar a Babilonia, pero no sanó. Abandónenla. Vayamos cada uno a nuestra tierra, porque su castigo llega hasta el cielo. Se levanta hasta las nubes.


¿Se avergonzaron porque cometieron repugnancia? ¡No! Ciertamente de nada se avergüenzan, ni aun saben ruborizarse. Por tanto, caerán entre los que caen, en el tiempo cuando Yo los castigue. Serán derribados, dice Yavé.


¿Se avergonzaron cuando cometieron repugnancia? Ciertamente no se avergonzaron ni supieron ruborizarse. Por tanto, caerán con los que caigan. En el tiempo de su castigo tropezarán, dice Yavé.


Nosotros transgredimos y fuimos rebeldes. Tú no nos perdonaste.


para que te acuerdes, te avergüences y no vuelvas a abrir tu boca de vergüenza cuando Yo te perdone todo lo que hiciste, dice ʼAdonay Yavé.


Pero si ellos confiesan sus iniquidades, las iniquidades de sus antepasados, su infidelidad que cometieron contra Mí, y también confiesan que anduvieron en oposición contra Mí,


El hijo le habló: Padre, pequé contra el cielo y contra ti. No soy digno de que me llames tu hijo.


Pero el publicano, situado lejos, no quería ni aun levantar los ojos al cielo, sino golpeaba su pecho y decía: ¡Dios, compadécete de mí, pecador!


¿Qué fruto tenían de aquellas cosas de las cuales ahora se avergüenzan? Porque el fin de ellas es muerte.


Porque sus pecados fueron apilados hasta el cielo, y Dios recordó sus crímenes.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite