Apocalipsis 3:19 - Palabra de Dios para ti 2022

¹⁹ Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Por tanto, sé fervoroso y cambia de mente.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁹ Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁹ Yo corrijo y disciplino a todos los que amo. Por lo tanto, sé diligente y arrepiéntete de tu indiferencia.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁹ Yo reprendo y corrijo a los que amo. Vamos, anímate y conviértete.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁹ Yo reprendo y disciplino a todos los que amo,° sé pues fervoroso, y arrepiéntete.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁹ Yo, a los que amo, los reprendo y castigo. ¡Anímate, pues, y conviértete!

Apocalipsis 3:19 Referans Kwoze

2 Samuel 7:14

Yo le seré padre y él me será hijo. Cuando haga mal lo corregiré con vara de hombres y con azotes de los hijos de hombres.

Job 5:17

Dichoso el hombre a quien ʼElohim disciplina. No menosprecies la corrección de ʼEL-Shadday,

Salmos 39:11

Corriges al hombre con castigos por su iniquidad. Como polilla carcomes lo que es precioso para él. Ciertamente todo hombre es solo un soplo. Selah

Salmos 6:1

Oh Yavé, no me reprendas en tu furor. Ni me disciplines en tu ardiente ira.

Salmos 69:9

Porque el celo de tu Casa me consume, Y las ofensas de los que te reprochan Cayeron sobre mí.

Salmos 94:10

El que amonesta a las naciones, ¿no reprenderá? El que enseña al hombre el saber, ¿no sabrá?

Proverbios 15:10

La disciplina molesta al que abandona el camino. El que aborrece la corrección morirá.

Proverbios 15:32

El que rechaza la corrección menosprecia su vida, El que escucha la amonestación adquiere entendimiento.

Proverbios 22:15

La necedad se pega al corazón del niño. La vara de la corrección se la apartará.

Isaías 26:16

Oh Yavé, en la tribulación te buscaron. Solo pudieron susurrar una oración. Tu castigo estaba sobre ellos.

Jeremías 10:24

Corrígeme, oh Yavé, pero con justicia, no con tu furor, pues me reducirás a nada.

Jeremías 2:30

En vano azoté a los hijos de ustedes. Ellos no recibieron corrección. La espada de ustedes devoró a sus profetas, como un león destructor.

Jeremías 30:11

Porque Yo estoy contigo para salvarte, dice Yavé. Destruiré a todas las naciones en las cuales te dispersé, pero a ti no te destruiré. Te corregiré con justicia. De ninguna manera te dejaré impune.

Jeremías 31:18

Escuché atentamente el lamento de Efraín: Me azotaste. Fui castigado como novillo indómito. Conviérteme, y seré convertido, porque Tú eres Yavé mi ʼElohim.

Jeremías 7:28

Por tanto les dirás: Ésta es la nación que no escucha la voz de Yavé su ʼElohim, ni admite corrección. Pereció la verdad. Fue cortada de la boca de ellos.

Sofonías 3:2

No escucha la voz ni recibe la corrección, no confía en Yavé ni se acerca a su ʼElohim.

Mateo 25:7

Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas.

Juan 2:17

Recordaron sus discípulos que está escrito: El celo de tu Casa me consumirá.

Romanos 12:11

en cuanto a diligencia, no perezosos. Sean fervientes en espíritu y sirvan al Señor.

1 Corintios 11:32

Pero al ser juzgados, somos disciplinados por el Señor, para que no seamos condenados por el mundo.

2 Corintios 6:9

como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, pero hasta aquí vivimos; como castigados, pero no muertos;

2 Corintios 7:11

Consideren que por ser entristecidos según Dios, ¡cuánta diligencia se manifestó en ustedes! También defensa, indignación, temor, ardiente afecto, celo y vindicación. Se demostraron a ustedes mismos que son inocentes en todo.

Gálatas 4:18

Bueno es estar siempre profundamente preocupado por lo bueno, y no solo al estar presente yo con ustedes.

Deuteronomio 8:5

Reconoce, pues, en tu corazón, que como un hombre corrige a su hijo, así te corrige Yavé tu ʼElohim.

Tito 2:14

Quien se dio a sí mismo por nosotros para librarnos de toda iniquidad, y purificar para sí un pueblo escogido, celoso de buenas obras.

Santiago 1:12

Inmensamente feliz el varón que soporta la prueba, porque al ser aprobado, ganará la corona de la vida que Dios prometió a los que lo aman.

Apocalipsis 2:5

Por tanto recuerda de dónde caíste y cambia de mente. Haz las primeras cosas. Si no cambias de mente, iré a ti y removeré tu candelabro de su lugar.