Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





2 Reyes 2:4 - Palabra de Dios para ti 2022

4 Elías le dijo: Eliseo, quédate aquí, porque Yavé me envió a Jericó. Y él dijo: ¡Vive Yavé y vive tu alma que no te dejaré! Y fueron a Jericó.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 Y Elías le volvió a decir: Eliseo, quédate aquí ahora, porque Jehová me ha enviado a Jericó. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Vinieron, pues, a Jericó.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Entonces Elías le dijo a Eliseo: —Quédate aquí, porque el Señor me dijo que fuera a Jericó. Pero Eliseo le respondió de nuevo: —Tan cierto como que el Señor vive y que tú vives, ¡nunca te dejaré! Así que continuaron juntos a Jericó.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Elías le dijo: 'Eliseo, quédate aquí por favor, porque Yavé me manda a Jericó'. Pero él respondió: 'Tan cierto como que Yavé vive y que yo vivo, que no te dejaré'. Y así llegaron a Jericó.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Y Elías le dijo: Eliseo, quédate ahora aquí, porque YHVH me ha enviado a Jericó. Pero él dijo: ¡Vive YHVH y vive tu alma que no te dejaré! Y fueron a Jericó.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Y Elías dijo a Eliseo: 'Quédate aquí, porque Yahveh me envía a Jericó'. Pero él respondió: '¡Por vida de Yahveh y tu vida, que no te abandonaré!'. Y llegaron a Jericó.

Gade chapit la Kopi




2 Reyes 2:4
10 Referans Kwoze  

En ese tiempo Hiel de Bet-ʼEl reedificó Jericó. Puso los cimientos con el sacrificio de Abiram, su primogénito, y con el sacrificio de Segub, su hijo menor, levantó sus puertas, según la Palabra que Yavé dijo por medio de Josué, hijo de Nun.


Elías dijo a Eliseo: Quédate aquí, porque Yavé me envió a Bet-ʼEl. Y Eliseo respondió: ¡Vive Yavé y vive tu alma que no te dejaré! Entonces bajaron a Bet-ʼEl.


Y la madre del niño dijo: Vive Yavé y vive tu alma que no te dejaré. Y él se levantó y la siguió.


Cuando Jesús entró en Jericó, iba por la ciudad.


Cuando él llegó y vio la gracia de Dios, se regocijó y exhortaba a todos para que permanecieran fieles al Señor con firmeza de corazón.


Perseveraban en la enseñanza de los apóstoles, la comunión, el partimiento del pan y las conversaciones con Dios.


A causa de los hijos de Israel, Jericó estaba cerrada y trancada. Ninguno salía ni entraba.


En aquel tiempo Josué hizo una imprecación: ¡Maldito delante de Yavé el hombre que se levante y reedifique esta ciudad de Jericó! ¡Sobre su primogénito eche sus cimientos y sobre su hijo menor asiente sus portones!


Rut respondió: No me ruegues que te deje y me aparte de ti. Porque adondequiera que tú vayas, yo iré, y dondequiera que vivas, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu ʼElohim mi ʼElohim.


Y Ana dijo: Oh, ʼadón mío, vive tu alma. ʼAdón mío, yo soy aquella mujer que estuvo aquí junto a ti y oraba a Yavé.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite