Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Nehemías 9:30 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

30 »Tú fuiste paciente con ellos por muchos años. Enviaste profetas que les advirtieran la gravedad de su pecado, pero no quisieron oír. Entonces una vez más permitiste que las otras naciones los vencieran y los conquistaran.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

30 Les soportaste por muchos años, y les testificaste con tu Espíritu por medio de tus profetas, pero no escucharon; por lo cual los entregaste en mano de los pueblos de la tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 En tu amor fuiste paciente con ellos durante muchos años. Enviaste tu Espíritu, quien les advertía por medio de los profetas. ¡Pero aun así no quisieron escuchar! Entonces nuevamente permitiste que los pueblos de la tierra los conquistaran;

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Sin embargo, tú has sido paciente con ellos durante años, les advertiste por tu espíritu, por boca de tus profetas, pero no te hicieron caso. Entonces los entregaste en manos de las naciones paganas;'

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Pero Tú continuaste a favor de ellos° muchos años, y testificaste contra ellos mediante tu Espíritu por mano de tus profetas, pero no dieron oído; por eso los entregaste en mano de los pueblos de la tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Fuiste paciente durante muchos años, los exhortabas por tu espíritu, mediante tus profetas, pero ellos no prestaron oído; por eso los entregaste en manos de las gentes del país.

Gade chapit la Kopi




Nehemías 9:30
34 Referans Kwoze  

Fue en aquel tiempo cuando el rey de Asiria transportó a los israelitas a Asiria y los puso en colonias en las ciudades de Jalaj, en Gozán, que está junto al río Jabor, y en las ciudades de los medos.


Entonces el Señor declaró por medio de los profetas:


El Señor les envió profetas, para que les advirtieran de su pecado y los animaran a volver a él, pero el pueblo no quiso oírlos.


»Y ahora, Dios, ¿qué podemos decir después de todo esto? Una vez más nos hemos apartado de ti y hemos quebrantado tus leyes.


»Enviaste tu generoso espíritu para que les enseñara, y no dejaste de darles pan del cielo o agua para la sed.


»Pero a pesar de todo esto, fueron desobedientes y se rebelaron contra ti. Dejaron tu ley, dieron muerte a los profetas que les exhortaban a volver a ti, e hicieron muchas otras cosas abominables.


Los castigaste para hacer que se volvieran a tus leyes, pero ellos se mostraron soberbios y no quisieron obedecerte; pasaron por alto tus enseñanzas que dan vida al que las pone en práctica. Fueron rebeldes y tercos, y no quisieron escucharte.


pero tú, Señor, eres misericordioso y bueno, Dios, lento para enojarte, y lleno de gran amor y verdad.


«Cuarenta años estuve enojado con ellos, y dije: “Son un pueblo cuyo corazón está muy lejos de mí. No quieren hacer lo que les digo”.


¡Nos dice las cosas una y otra vez, renglón por renglón, con palabras tan simples!».


¿Quién permitió que a Israel se le robara y dañara? ¿No fue el Señor? Fue el Señor contra el cual pecaron, porque no quisieron ir a donde él los enviaba ni escuchar sus leyes.


Mas por mí mismo y por la honra de mi nombre refrenaré mi ira y no los destruiré.


¡Pero ellos volvieron a rebelarse y ofendieron a su Santo Espíritu! Por eso se transformó él en su adversario y los combatió personalmente.


Durante mucho tiempo el Señor les ha enviado sus profetas, pero ustedes se han negado a oír.


Fue por no poder soportar más todas las maldades que cometían que él desoló su tierra, convirtiéndola en increíble ruina, reseca, despoblada, tal como está hoy.


Una y otra vez envié a mis siervos los profetas a protestar y a suplicarles que no cometieran este horrible acto que yo detesto,


pero no quisieron oír ni abandonar sus malas acciones, sino que han continuado rindiéndole honores a esos «dioses».


Desde el día que sus antepasados salieron de Egipto hasta ahora, he continuado enviándoles mis profetas día tras día.


El Señor es quien llevó a cabo lo que había planeado. Cumplió las promesas de desastre que hizo hace mucho tiempo. Destruyó a Jerusalén sin piedad y ha permitido que sus enemigos se rían de ella y presuman delante de ella su poder.


No hemos hecho caso a tus servidores los profetas, quienes hablaron en tu nombre a nuestros reyes, príncipes, a nuestros antepasados y a todo el pueblo de esta tierra.


Endurecieron su corazón como si fuera pedernal, para no hacer caso a las palabras que yo, el Señor Todopoderoso, les enviaba, las instrucciones que por mi Espíritu había revelado a los profetas antiguos. Por esta razón yo, el Señor Todopoderoso, los traté con mucha cólera y rigor.


Fue por esta situación que cuando ellos clamaron a mí, yo no atendí a sus ruegos, así como ellos no quisieron obedecerme cuando yo les hablé.


Pero dos de aquellos setenta —Eldad y Medad— se habían quedado en el campamento, y cuando el Espíritu vino a ellos, profetizaron allí.


Como no pudieron ponerse de acuerdo entre ellos, comenzaron a irse. Entonces Pablo finalmente les dijo: «El Espíritu Santo tenía razón cuando les habló a sus antepasados por medio del profeta Isaías y les dijo:


»¡Tercos! ¡Infieles! ¿Hasta cuándo van a estar resistiendo al Espíritu Santo? Claro, ¡de tal palo tal astilla!


¿No te das cuenta de que por las riquezas de su generosidad, bondad y paciencia ha estado aguardando sin castigarte para darte tiempo a que te apartes de tus pecados?


Querían descubrir a qué tiempo y a qué circunstancias se refería el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, cuando de antemano les hizo saber lo que Cristo sufriría y la gloria que vendría después de esos sufrimientos.


porque los profetas no hablaron por su propia iniciativa. Ellos hablaron de parte de Dios, y fueron inspirados por el Espíritu Santo.


El Señor no demora el cumplimiento de su promesa, como algunos suponen. Más bien lo que quiere es que nadie se pierda, por lo que está alargando el plazo para que todos se arrepientan.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite