Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Mateo 26:58 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

58 Pedro lo siguió de lejos, llegó hasta el patio del sumo sacerdote y se sentó entre los soldados a esperar el desarrollo de los acontecimientos.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

58 Mas Pedro le seguía de lejos hasta el patio del sumo sacerdote; y entrando, se sentó con los alguaciles, para ver el fin.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

58 Mientras tanto, Pedro lo siguió de lejos y llegó al patio del sumo sacerdote. Entró, se sentó con los guardias y esperó para ver cómo acabaría todo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

58 Pedro lo iba siguiendo de lejos, hasta llegar al palacio del sumo sacerdote. Entró en el patio y se sentó con los policías del Templo, para ver en qué terminaba todo.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

58 Y Pedro lo seguía de lejos, hasta el patio del sumo sacerdote; y entrando, se sentó con los guardianes para ver el fin.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

58 Pedro lo iba siguiendo de lejos hasta el patio del sumo sacerdote; entró allí dentro y se sentó con los criados, para ver en qué terminaba aquello.

Gade chapit la Kopi




Mateo 26:58
10 Referans Kwoze  

En aquel mismo instante, los principales sacerdotes y los funcionarios judíos se reunían en la residencia de Caifás, el sumo sacerdote, y discutían sobre la manera de capturar a Jesús a espaldas del pueblo y matarlo.


Reconcíliate con tu enemigo de inmediato antes que sea demasiado tarde, te lleve a juicio y te arrojen en la cárcel.


Entonces arrestaron a Jesús y lo llevaron a la casa del jefe de los sacerdotes. Pedro los seguía de lejos.


Mientras tanto, Simón Pedro seguía de pie, calentándose. Le preguntaron: ―¿No eres tú uno de sus discípulos? Pedro, negándolo, dijo: ―No lo soy.


Al verlo, los jefes de los sacerdotes y los guardias gritaron: ―¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo! Pilato les respondió: ―Llévenselo y crucifíquenlo ustedes. Yo no creo que sea culpable de nada.


Cuando los fariseos oyeron que la gente murmuraba estas cosas acerca de él, se pusieron de acuerdo con los jefes de los sacerdotes y mandaron unos guardias del templo para arrestarlo.


Los guardias del templo volvieron a donde estaban los jefes de los sacerdotes y los fariseos, quienes les preguntaron: ―¿Por qué no lo han traído?


Pero cuando los guardias llegaron a la cárcel no los encontraron allí, y regresaron a notificarlo.


El jefe de la guardia corrió con los alguaciles a arrestarlos, sin hacer uso de la fuerza, por temor a que el pueblo los apedreara.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite