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Job 7:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

6 »Mis días se van más veloces que una lanzadera, y sin esperanza alguna llegan a su fin.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

6 Y mis días fueron más veloces que la lanzadera del tejedor, Y fenecieron sin esperanza.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 »Mis días pasan más rápido que la lanzadera de un telar y terminan sin esperanza.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 mis días han corrido más rápidos que la lanzadera, y se pararon cuando ya no hubo hilo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Mis días se me van más veloces que la lanzadera,° Y se me acaban por falta de hilo.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Fueron mis días más rápidos que la lanzadera y terminaron por falta de hilo.

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Job 7:6
23 Referans Kwoze  

Dios puede matarme por decirlo, y probablemente lo haga. No obstante, voy a defender mi caso con él.


Pasarán sólo unos cuantos años antes de que yo emprenda el viaje sin regreso.


»Enfermo estoy y próximo a la muerte; el sepulcro está presto a recibirme.


Mis buenos días pasaron. Mis esperanzas han desaparecido. Los anhelos de mi corazón se han deshecho.


¿Dónde, pues, está mi esperanza? ¿Hay quién pueda encontrarla?


No, mi esperanza bajará conmigo al sepulcro. ¡Juntos reposaremos en el polvo!».


Me ha quebrantado por todas partes y estoy acabado. Me ha destruido toda esperanza,


»¡Ay! ¿Por qué me sustenta mi vigor? ¿Cómo tener paciencia hasta morir?


»Veloz se me va la vida cargada de tragedia.


Pasa veloz mi vida como las sombras de la noche. Me voy marchitando como la hierba


Porque el ser humano no es más que un soplo; sus días son sombras pasajeras.


Al malvado lo aplasta su propia maldad; al justo lo protege su justicia.


¿Por qué no dejas al estéril correr tras otros dioses? Sabes que el Señor te provee para tus necesidades, pero tú dices: «No malgastes palabras. ¡Estoy enamorada de estos extranjeros y no puedo dejar de amarlos ahora!».


Recuerden que en aquellos días ustedes vivían alejados del Mesías, excluidos de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa. Vivían en el mundo sin Dios y sin esperanza.


Cuando el sol sale, seca la planta con su calor intenso. A la planta se le marchita la flor y pierde su belleza. Así se marchitará también el rico en todos sus negocios.


¡Pero si ni siquiera saben lo que sucederá mañana! La vida de ustedes es como la niebla que aparece por un momento y luego desaparece.


Por eso, estén listos para actuar con inteligencia y tengan dominio propio. Pongan su esperanza completamente en lo que se les dará cuando Jesucristo regrese.


«Todo humano es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo; la hierba se seca y la flor se cae,


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