Job 6:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

⁴ Porque el Señor me ha derribado con sus flechas: en lo profundo de mi corazón ha clavado sus dardos venenosos. Todos los terrores de Dios militan contra mí.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Porque las saetas del Todopoderoso están en mí, Cuyo veneno bebe mi espíritu; Y terrores de Dios me combaten.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ Pues el Todopoderoso me ha derribado con sus flechas; y el veneno de ellas infecta mi espíritu. Los terrores de Dios están alineados contra mí.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Llevo en mí las flechas del Omnipotente mi espíritu bebe su veneno, ¿qué diré a Dios cuando ellas me atormentan?

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ Porque en mí están clavadas° las saetas de ’El-Shadday, Y mi espíritu sorbe su veneno, Y los terrores de Dios se alistan contra mí en orden de batalla.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ Me penetran las flechas de Sadday, y mi espíritu bebe su veneno: los terrores de Dios conspiran contra mí.

Job 6:4 Referans Kwoze

Job 16:9

»Dios me aborrece y airadamente rasga mi carne; me ha desgarrado con sus dientes, y ha acechado para extinguir en mí toda señal de vida.

Job 19:12

Envía sus ejércitos a sitiar mi tienda.

Job 20:16

Para él son veneno y muerte.

Job 21:20

Sí, que sea destruido por su maldad. Que beba bastante de la ira del Todopoderoso,

Job 30:15

Ahora vivo aterrorizado. Me desprecian, y mi prosperidad se ha desvanecido como nube ante fuerte viento.

Job 31:23

Eso antes que enfrentarme al castigo de Dios. Lo que él manda es lo que más temo, porque si la majestad de Dios fuera en contra mía, ¿qué esperanza habría?

Job 34:6

Se me llama mentiroso, aunque soy inocente. Se me castiga espantosamente, aun cuando no he pecado”.

Job 7:20

¿Te ha perjudicado mi pecado, oh Dios, guarda de la humanidad? ¿Por qué me has tomado como blanco, y hecho que la vida se me torne tan pesada carga?

Job 9:17

Pues él es quien destruye, quien multiplica mis heridas sin causa alguna.

Salmos 143:7

Ven pronto, Señor, y respóndeme, porque cada vez me deprimo más; ¡no te apartes de mí, o me muero!

Salmos 18:14

Lanzó las tremendas flechas de sus rayos y derrotó a todos mis enemigos. ¡Miren cómo huyen!

Salmos 21:12

Volverán la espalda y huirán al ver que tus flechas les apuntan.

Salmos 38:2

Tus flechas me han herido profundamente; tus golpes me están demoliendo.

Salmos 38:3

Por tu ira tengo el cuerpo enfermo; mi salud está quebrantada bajo mis pecados.

Salmos 45:5

Tus agudas saetas traspasan el corazón de tus enemigos. Las naciones ante ti se desploman, yacen bajo tus pies.

Salmos 7:13

ha preparado mortíferas armas y flechas de fuego.

Proverbios 14:10

Cada corazón conoce su propia amargura, y ningún extraño puede compartir su alegría.

Proverbios 18:14

El ánimo del hombre puede sostener al enfermo, ¿pero quién puede levantar al abatido?

Isaías 28:19

Una y otra vez volverá aquel torrente y los arrastrará hasta que finalmente comprendan con horror lo verdaderas que son mis advertencias».

Lamentaciones 2:4

Ha atacado como si fuera un guerrero enemigo, dando muerte con sus flechas a nuestros muchachos más valiosos del país. Como el fuego que destruye una tienda valiosa, así derramó su enojo contra Jerusalén.

Lamentaciones 3:3

Se ha vuelto contra mí, de día y de noche me castiga sin parar.

Marcos 15:34

A esta hora Jesús gritó con fuerza: —Eloi, Eloi, ¿lama sabactani? (que significa: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?)

2 Corintios 5:11

Impulsados por este temor reverencial al Señor, tratamos arduamente de persuadir a otros. Dios sabe que nuestros corazones son sinceros en cuanto a esto, y espero que ustedes lo sepan también.

Deuteronomio 32:42

Mis saetas se embriagarán con sangre y mi espada devorará la carne y la sangre de todos los muertos y cautivos. Las cabezas del enemigo estarán ensangrentadas”.

Rut 1:20

Pero ella contestaba: ―No me llamen Noemí. Llámenme Mara (Noemí significa “dulce”; Mara significa “amarga”), porque el Todopoderoso me ha dado gran amargura.