31 Han prendido fuego a sus aposentos y han hecho pedazos sus trancas.
Carteros y mensajeros salen unos después de otros para comunicar al rey de Babilonia que su ciudad ha sido totalmente tomada,
Así que los mensajeros recorrieron todo Israel y Judá, para dar a conocer a la gente el mensaje que contenían las cartas enviadas por el rey y sus oficiales. El mensaje era el siguiente: «Vuélvanse al Señor, Dios de Abraham, Isaac e Israel, para que él se vuelva a nosotros, los que hemos escapado del poder de los reyes de Asiria.
Los mensajeros, por orden directa del rey, salieron rápidamente montados sobre los veloces caballos del rey. El mismo decreto también fue promulgado en el palacio de Susa.
¡Arremeten con todas sus fuerzas dejando destrucción por todos lados! Súbitamente, en un abrir y cerrar de ojos, destruyen las casas y saquean las pertenencias.
Dile a todo el mundo que Babilonia será destruida. No ahorren en medios para dar a conocer por todas partes la pronta destrucción de Babilonia. Sus dioses Marduc y Bel serán completamente avergonzados,