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Isaías 38:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

8 Haré que el sol retroceda diez grados en el cuadrante de Acaz. ¡Y el sol retrocedió diez grados que había recorrido en el reloj!».

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 He aquí yo haré volver la sombra por los grados que ha descendido con el sol, en el reloj de Acaz, diez grados atrás. Y volvió el sol diez grados atrás, por los cuales había ya descendido.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

8 “¡Haré retroceder diez gradas la sombra del sol en el reloj solar de Acaz!”». Así que la sombra se movió diez gradas hacia atrás en el reloj solar.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 La sombra que proyecta el sol sobre las escaleras del palacio de Ajaz va a retroceder diez grados de los ya recorridos. Y la sombra retrocedió diez grados de los que ya había recorrido.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 He aquí Yo hago retroceder diez gradas° la sombra del sol que ha descendido en la gradería de Acaz. Y el sol° volvió atrás diez gradas, sobre las cuales ya había descendido.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Mira: voy a hacer que retroceda diez grados la sombra del cuadrante, la que ha descendido ya en el cuadrante de Ajaz, al sol'. Y el sol retrocedió en el cuadrante los diez grados que había descendido.

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Isaías 38:8
8 Referans Kwoze  

Un día Ezequías enfermó de muerte; entonces oró al Señor, y él le respondió con un milagro.


Sin embargo, cuando llegaron los embajadores de Babilonia para saber acerca del milagro maravilloso que había ocurrido en el país, Dios lo dejó solo para probarlo y ver cómo era realmente.


Cuando el rey Ezequías se restableció, escribió este poema relativo a su experiencia:


Acaz, pídeme una señal para demostrarte que en realidad aplastaré a tus enemigos como lo tengo dicho. Pide lo que quieras que haga en cualquier lugar del globo terraqueo.


Un día, los fariseos y los saduceos fueron a donde estaba Jesús a pedirle que demostrara, con alguna señal milagrosa en el cielo, que él había sido enviado por Dios.


―Si es cierto que vas a ayudarme de esa manera —dijo Gedeón—, haz una señal para probarlo; pruébame que es realmente el Señor quien me está hablando.


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