Génesis 21:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

¹⁵ Cuando se le terminó el agua de la vasija, puso al muchacho bajo un arbusto.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Y le faltó el agua del odre, y echó al muchacho debajo de un arbusto,

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ Cuando se acabó el agua, Agar puso al muchacho a la sombra de un arbusto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ Cuando no quedó nada de agua en el recipiente de cuero, dejó tirado al niño bajo un matorral

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ Y cuando se acabó el agua del odre, entonces puso al muchacho bajo uno de los arbustos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ Cuando se acabó el agua del odre, dejó al niño bajo un arbusto

Génesis 21:15 Referans Kwoze

Génesis 21:14

Al día siguiente, Abraham se levantó temprano, preparó alimentos para el viaje, ató una vasija de cuero con agua a las espaldas de Agar y la despidió junto con su hijo. Ella se fue y anduvo de un lado para otro por el desierto de Berseba.

Génesis 21:16

Luego ella fue a sentarse a cierta distancia de allí, pues se decía a sí misma: «No quiero verlo morir». Cuando ella se sentó, el niño se puso a llorar a gritos.

1 Reyes 17:12

Pero ella le respondió: ―La verdad es que no tengo ni un solo pedazo de pan. Lo único que me queda es un puñado de harina y un poco de aceite. Estaba juntando algunas ramas para hacer fuego, para preparar mi última comida, para que luego mi hijo y yo nos muramos de hambre. Esto es tan cierto como que el Señor tu Dios vive.

2 Reyes 3:9

Salieron los reyes de Israel y Judá con el rey de Edom y dieron un rodeo a través del desierto durante siete días; pero no había agua para los hombres ni para los animales de carga.

Salmos 63:1

¡Oh Dios, mi Dios! ¡Cómo te busco! ¡Qué sed tengo de ti en esta tierra reseca y triste en donde no hay agua! ¡Cómo anhelo encontrarte!

Isaías 44:12

El herrero ante la fragua hace el hacha golpeándola con todas sus fuerzas. Hambriento y sediento, se siente débil y desfalleciente.

Jeremías 14:3

Los nobles envían empleados a los pozos en busca de agua, pero los encuentran secos. Contrariados y desesperados, regresan los empleados y en señal de desesperación se cubren la cabeza, como es la costumbre.