Deuteronomio 9:2 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

² Estas naciones son más numerosas y poderosas que tú. Sus habitantes viven en ciudades grandes y amuralladas. Entre ellos están los famosos gigantes, descendientes de Anac, a quienes nadie ha podido vencer.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

² un pueblo grande y alto, hijos de los anaceos, de los cuales tienes tú conocimiento, y has oído decir: ¿Quién se sostendrá delante de los hijos de Anac?

Biblia Nueva Traducción Viviente

² Los habitantes son altos y fuertes, son descendientes de los famosos gigantes anaceos. Has escuchado que se dice: “¿Quién puede hacer frente a los anaceos?”.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² Es un pueblo grande, de alta estatura, los enaceos, que tú mismo has visto y de quienes se dice que nadie puede vencerlos.

La Biblia Textual 3a Edicion

² a un pueblo grande y alto, hijos de los anaceos, de los que tú conociste y oíste decir: ¿Quién se enfrentará a los hijos de Anac?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² de un pueblo grande y de elevada estatura, los descendientes de los anaquitas, que ya conoces, y de quienes has oído decir: '¿Quién podrá oponerse a los hijos de Anac?'.

Deuteronomio 9:2 Referans Kwoze

Job 11:10

Si viene y te pone en un calabozo, y luego te llama a cuentas, ¿quién lo hará desistir?

Éxodo 9:11

Los magos no pudieron presentarse delante de Moisés, pues también ellos, como toda la gente, tenían úlceras llenas de pus.

Daniel 11:16

El rey del norte hará lo que se le antoje, pues nadie podrá hacerle frente, y se quedará en la tierra privilegiada de Israel, destruyendo todo.

Daniel 8:4

»El carnero atacaba todo lo que se le ponía al frente en su camino hacia el oeste, el norte y el sur, y nadie podía enfrentarlo o siquiera ayudar a sus víctimas. Hacía lo que quería, y cada vez se volvía más poderoso.

Amós 2:9

»¡Deberían recordar lo que yo hice por ustedes, ingratos! ¡Yo expulsé a los amorreos de su tierra para dársela a ustedes! ¡Sí, los destruí completamente, aunque eran altos como los cedros y poderosos como los robles!

Nahúm 1:6

¿Quién puede permanecer en pie ante la cólera de Dios? Su enojo es como el ardor del fuego, que es capaz de arrasar con todo lo que se ponga a su paso; hasta las montañas tiemblan cuando Dios da rienda suelta a su enojo.

Números 13:22

Yendo hacia el norte, atravesaron el Néguev y llegaron a Hebrón. Allí vieron a los descendientes de Ajimán, de Sesay y de Talmay, descendientes de Anac. (Hebrón era muy antigua, y había sido fundada siete años antes que Zoán, en Egipto).

Números 13:28

Pero el pueblo que vive en ella es poderoso, sus ciudades están fortificadas y son grandes y, lo que es peor, hemos visto gigantes descendientes de Anac en aquellos lugares.

Números 13:33

y vimos gigantes descendientes de Anac. Eran tan grandes que parecíamos langostas al lado de ellos.

Deuteronomio 1:28

¿A dónde vamos a entrar? Nuestros hermanos que han visitado la tierra nos han atemorizado con todo lo que nos contaron. Dicen que la gente de esa tierra es alta y fuerte, y que los muros de sus ciudades llegan hasta el cielo. Por si fuera poco, han visto gigantes allí: los descendientes de Anac”.

Deuteronomio 2:21

Eran una tribu grande y poderosa, de hombres tan altos como los anaceos. Pero el Señor los destruyó cuando los amonitas entraron en esa tierra y vivieron allí en su lugar.

Deuteronomio 7:24

Dios entregará los reyes de esas naciones en tus manos, y tú borrarás sus nombres de la faz de la tierra. Ninguno podrá prevalecer en contra tuya.

Josué 11:21

Durante este período Josué derrotó a todos los gigantes descendientes de Anac que vivían en las montañas de Hebrón, Debir, Anab, Judá e Israel. Los mató a todos y destruyó completamente sus ciudades.

Josué 11:22

Ninguno quedó en la tierra de Israel, aunque algunos quedaron en Gaza, Gat y Asdod.

Josué 15:14

Caleb derrotó allí a los descendientes de los tres hijos de Anac: Sesay, Ajimán y Talmay.