Santiago 5:14 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

¹⁴ ¿Está enfermo alguno de ustedes? Haga llamar a los líderes de la iglesia para que oren por él y le pongan aceite en el nombre del Señor.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁴ ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁴ ¿Alguno está enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia, para que vengan y oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁴ ¿Hay alguno enfermo? Que llame a los ancianos de la Iglesia, que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁴ ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Haga llamar a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndolo con aceite° en el nombre del Señor.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁴ ¿Está alguno enfermo? Haga llamar a los presbíteros de la Iglesia, que oren sobre él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor.

Santiago 5:14 Referans Kwoze

Marcos 16:18

Tomarán en sus manos serpientes; y, cuando beban algo venenoso, no les hará daño alguno. Pondrán las manos sobre los enfermos y estos recobrarán la salud.

Marcos 6:13

También echaban fuera a muchos demonios y sanaban a muchos enfermos, ungiéndolos con aceite.

Hechos 11:30

Así lo hicieron, mandando su ofrenda a los líderes por medio de Bernabé y de Saulo.

Hechos 14:23

En cada una de las iglesias nombraron líderes. Luego, con oración y ayuno, le pidieron al Señor que ayudara a estos líderes que habían creído en él.

Hechos 15:4

Al llegar a Jerusalén, fueron muy bien recibidos por la iglesia, los apóstoles y los líderes. Luego Pablo y Bernabé les informaron de todo lo que Dios había hecho por medio de ellos.

Hechos 28:8

El padre de Publio estaba en cama, enfermo con fiebre y disentería. Pablo entró a verlo y, después de orar, puso sus manos sobre él y lo sanó.

Hechos 9:40

Pedro hizo que todos salieran del cuarto; luego se puso de rodillas y oró. Volviéndose hacia la muerta, dijo: «Tabita, levántate». Ella abrió los ojos y, al ver a Pedro, se incorporó.

Tito 1:5

Te dejé en Creta para que pusieras en orden lo que quedaba por hacer y en cada pueblo nombraras líderes de la iglesia, de acuerdo con las instrucciones que te di.