Juan 8:29 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

²⁹ El que me envió está conmigo. No me ha dejado solo, porque siempre hago lo que le agrada.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁹ Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁹ Y el que me envió está conmigo, no me ha abandonado. Pues siempre hago lo que a él le agrada».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁹ El que me ha enviado está conmigo y no me deja nunca solo, porque yo hago siempre lo que le agrada a él.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁹ Y el que me envió está conmigo. No me dejó solo,° porque Yo hago siempre lo que le agrada.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁹ Conmigo está el que me ha enviado: no me ha dejado solo, porque yo hago siempre lo que es de su agrado'.

Juan 8:29 Referans Kwoze

Mateo 17:5

Mientras estaba aún hablando, apareció una nube luminosa que los envolvió, de la cual salió una voz que dijo: «Este es mi Hijo amado; estoy muy contento con él. ¡Escúchenlo!».

Mateo 3:15

―Hagámoslo como te digo, pues nos conviene cumplir con lo que es justo —le contestó Jesús. Entonces Juan aceptó.

Mateo 3:17

Y una voz del cielo decía: «Este es mi Hijo amado; estoy muy contento con él».

Juan 14:31

Pero el mundo tiene que saber que amo al Padre, y que hago exactamente lo que él me ha ordenado que haga. »¡Levántense, vámonos de aquí!

Juan 15:10

Si obedecen mis mandamientos, permanecerán en mi amor. Yo he obedecido los mandamientos de mi Padre, por eso permanezco en su amor.

Juan 16:32

Miren que la hora viene, y ya está aquí, en que ustedes serán dispersados. Cada uno se irá a su propia casa y a mí me dejarán solo. Sin embargo, solo no estoy, porque el Padre está conmigo.

Juan 17:4

Yo te he dado la gloria en la tierra y he llevado a cabo la obra que me encomendaste.

Juan 4:34

―Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar su obra —les dijo Jesús—.

Juan 5:30

Yo no puedo hacer nada por mi propia cuenta, solo juzgo según lo que oigo. Y mi juicio es justo, pues no busco hacer mi propia voluntad. Busco cumplir la voluntad del que me envió.

Juan 6:38

Pues he bajado del cielo no para hacer mi voluntad, sino la del que me envió.

Juan 8:16

Y, si lo hago, mis juicios son válidos. Yo no lo hago por mi cuenta, sino en unión con el Padre que me envió.

2 Timoteo 4:17

Pero el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas para que por medio de mí se anunciara el mensaje y lo oyeran todos los que no creen en Dios. El Señor me salvó, como quien es librado de la boca de un león.

2 Timoteo 4:22

El Señor esté con tu espíritu, y a él le pido que te permita gozar de su inmerecido amor.

Hebreos 4:15

Pues no tenemos un sumo sacerdote incapaz de entender nuestras debilidades. Al contrario, contamos con uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, pero él nunca pecó.

Hebreos 7:26

Nos convenía tener un sumo sacerdote así: santo, sin maldad, sin pecado, apartado de los pecadores y a quien se le ha dado el honor más alto en cielo.

1 Juan 2:1

A ustedes los considero como hijos muy queridos. Por eso les escribo estas cosas para que no pequen. Pero, si alguno peca, tenemos ante el Padre a un defensor, a Jesucristo, el Justo.

1 Juan 3:22

Si obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada, recibiremos lo que le pidamos.