Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Zacarías 1:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

4 »“No sean como sus antepasados, a quienes les proclamaron los antiguos profetas que así dice el Señor de los Ejércitos: ‘Vuélvanse de sus malos caminos y de sus malas prácticas’. Porque ellos no me obedecieron ni me prestaron atención”, afirma el Señor.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 No seáis como vuestros padres, a los cuales clamaron los primeros profetas, diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos ahora de vuestros malos caminos y de vuestras malas obras; y no atendieron, ni me escucharon, dice Jehová.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 No sean como sus antepasados que no querían escuchar ni prestar atención cuando los antiguos profetas les dijeron: ‘El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: “Apártense de sus malos caminos y abandonen todas sus prácticas malvadas”’.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 No se porten como sus antepasados, a quienes los antiguos profetas les gritaban: 'Déjense de andar por malos caminos y no sigan haciendo maldades. Pero ellos no quisieron escucharlos, ni les hicieron caso.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

4 No seáis como vuestros padres, a quienes clamaron los primeros profetas, diciendo: Así dice YHVH Sebaot: Volveos ahora de vuestros malos caminos y de vuestras malas obras. Pero no escucharon, ni me atendieron, dice YHVH.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 No seáis como vuestros padres, a quienes los antiguos profetas anunciaron: 'Así dice Yahveh Sebaot: convertíos de vuestros malos caminos y de vuestras males acciones'. Pero ellos no escucharon ni me hicieron caso -oráculo de Yahveh-.

Gade chapit la Kopi




Zacarías 1:4
55 Referans Kwoze  

Los mensajeros salieron por todo Israel y Judá con las cartas del rey y de sus oficiales, y de acuerdo con la orden del rey iban proclamando: «Israelitas, vuélvanse al Señor, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, para que él se vuelva al remanente de ustedes, que escapó del poder de los reyes de Asiria.


No sean como sus antepasados ni como sus hermanos, que se rebelaron contra el Señor, Dios de sus antepasados. Por eso él los entregó a la ruina, como ahora lo pueden ver.


—Con respecto a lo que dice este libro que se ha encontrado, vayan a consultar al Señor por mí y por el remanente de Israel y de Judá. Sin duda que la gran ira del Señor se ha derramado contra nosotros porque nuestros antepasados no tuvieron en cuenta su palabra, ni actuaron según lo que está escrito en este libro.


Desde los días de nuestros antepasados hasta hoy, nuestra culpa ha sido grande. Debido a nuestras maldades, nosotros, nuestros reyes y nuestros sacerdotes fuimos entregados al poder de los reyes de otros países. Hemos sufrido la espada, el cautiverio, el pillaje y la humillación, como nos sucede hasta hoy.


»Pero ellos y nuestros antepasados fueron altivos; fueron tercos y no obedecieron tus mandamientos.


»Pero fueron desobedientes: se rebelaron contra ti, rechazaron tu Ley, mataron a tus profetas que los exhortaban a volverse a ti; ¡te ofendieron mucho!


Por años les tuviste paciencia; con tu Espíritu los amonestaste por medio de tus profetas, pero ellos no quisieron escuchar. Por eso los dejaste caer en manos de los pueblos de esa tierra.


Así no serían como sus antepasados: generación obstinada y rebelde, gente de corazón fluctuante, cuyo espíritu no se mantuvo fiel a Dios.


Israelitas, ¡vuélvanse a aquel contra quien ustedes se han rebelado tan abiertamente!


Y ahora habla con los habitantes de Judá y de Jerusalén y adviérteles que así dice el Señor: “Estoy preparando una calamidad contra ustedes y elaborando un plan en su contra. ¡Vuélvanse ya de su mal camino; enmienden su conducta y sus acciones!”.


Si hubieran estado en mi consejo, habrían proclamado mis palabras a mi pueblo; lo habrían hecho volver de su mal camino y de sus malas acciones.


»Por eso, así dice el Señor de los Ejércitos: “Por cuanto no han obedecido mis palabras,


y si no escuchan las palabras de mis siervos los profetas, a quienes una y otra vez he enviado y ustedes han desobedecido,


Ve al norte y proclama este mensaje: »“¡Vuelve, apóstata Israel! No te miraré con ira”, afirma el Señor. “No te guardaré rencor para siempre, porque soy misericordioso”, afirma el Señor.


«¡Vuélvanse a mí, apóstatas —afirma el Señor—, porque yo soy su esposo! De ustedes tomaré uno de cada ciudad y dos de cada familia, y los traeré a Sión.


Además, no he dejado de enviarles a mis siervos, los profetas, para decirles: ‘Conviértanse ya de su mal camino, enmienden sus acciones y no sigan a otros dioses para servirlos; entonces habitarán en la tierra que he dado a ustedes y a sus antepasados’. Pero ustedes no me han prestado atención; no me han hecho caso.


«Israel, si piensas volver, vuélvete a mí», afirma el Señor. «Si quitas de mi vista tus ídolos abominables y no te alejas de mí,


«No le haremos caso al mensaje que nos diste en el nombre del Señor.


»Por tanto, adviértele al pueblo de Israel que así dice el Señor y Dios: “¡Arrepiéntanse! Apártense de una vez y por todas de su idolatría y de todas sus abominaciones”.


Allí en el desierto dije a sus descendientes: ‘No sigan los estatutos de sus padres; no obedezcan sus leyes ni se contaminen con sus ídolos.


Diles: “Tan cierto como que yo vivo, afirma el Señor y Dios, no me alegro con la muerte del malvado, sino con que se convierta de su mala conducta y viva. ¡Conviértete, pueblo de Israel; conviértete de tu conducta perversa! ¿Por qué habrás de morir?”.


Entonces, si alguien escucha la trompeta, pero no se da por advertido, y llega la espada y lo mata, él mismo será el culpable de su propia muerte.


No hemos prestado atención a tus siervos los profetas que, en tu nombre, hablaron a nuestros reyes y príncipes, a nuestros antepasados y a todos los habitantes de la tierra.


Vuélvete, Israel, al Señor tu Dios. ¡Tu maldad te ha hecho caer!


Pero ¡que fluya el derecho como las aguas y la justicia como arroyo inagotable!


«No profeticen», dicen sus profetas. «No profeticen de esas cosas, pues la desgracia no nos alcanzará»


Por lo tanto, advierte al pueblo que así dice el Señor de los Ejércitos: »“Vuélvanse a mí, y yo me volveré a ustedes”, afirma el Señor de los Ejércitos.


»”¿No son estas las palabras que por medio de los antiguos profetas el Señor mismo proclamó cuando Jerusalén y las ciudades cercanas estaban habitadas y tenían paz, cuando el Néguev y las llanuras occidentales también estaban habitadas?”».


Al contrario, comenzando con los que estaban en Damasco, siguiendo con los que estaban en Jerusalén y en toda Judea, y luego con los no judíos, a todos les prediqué que se arrepintieran y se convirtieran a Dios, y que demostraran su arrepentimiento con sus buenas obras.


Por tanto, para que sean borrados sus pecados, arrepiéntanse y vuélvanse a Dios,


Como bien saben, ustedes fueron rescatados de la vida absurda que heredaron de sus antepasados. El precio de su rescate no se pagó con cosas perecederas, como el oro o la plata,


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite