Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Salmos 25:2 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

2 mi Dios, en ti confío; no permitas que sea yo humillado, no dejes que mis enemigos se burlen de mí.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

2 Dios mío, en ti confío; No sea yo avergonzado, No se alegren de mí mis enemigos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 ¡Confío en ti, mi Dios! No permitas que me avergüencen, ni dejes que mis enemigos se regodeen en mi derrota.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 a ti que eres mi Dios. En ti he confiado, que no quede avergonzado ni se rían de mí mis enemigos.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

2 b ¡Dios mío, en ti confío! No sea yo avergonzado, No se alegren de mí mis enemigos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 en tí, mi Dios, confío. Que no sufra vergüenza, que no tengan en mí mis enemigos motivo de alegría.

Gade chapit la Kopi




Salmos 25:2
32 Referans Kwoze  

En esa ocasión fueron humillados los israelitas, mientras que los de Judá salieron victoriosos porque confiaron en el Señor, Dios de sus antepasados.


Pero yo confío en tu gran amor; mi corazón se alegra en tu salvación.


Atiende a mi clamor, porque me siento muy débil; líbrame de mis perseguidores, porque son más fuertes que yo.


El Señor es mi roca, mi amparo, mi libertador; es mi Dios, la roca en que me refugio. Es mi escudo, el poder que me salva, ¡mi más alto escondite!


Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? ¿Por qué estás lejos para salvarme, tan lejos de mis gritos de angustia?


a ti clamaron y tú los salvaste; se apoyaron en ti y no los defraudaste.


«Este confía en el Señor, ¡pues que el Señor lo ponga a salvo! Ya que en él se deleita, ¡que sea él quien lo libre!».


En ti, Señor, busco refugio; jamás permitas que me avergüencen. Por tu justicia, líbrame.


Mi vida entera está en tus manos; líbrame de mis enemigos y perseguidores.


Inclina a mí tu oído y acude pronto a socorrerme. Sé tú mi roca de refugio, la fortaleza de mi salvación.


Prueben y vean que el Señor es bueno; dichosos los que se refugian en él.


El Señor los ayuda y los libra; los libra de los malvados y los salva, porque en él se refugian.


En esto conozco que te he agradado: en que mi enemigo no triunfe sobre mí.


Ten piedad de mí, oh Dios, pues hay gente que me persigue. Todo el día me atacan mis opresores,


¡Sálvame, Señor mi Dios, porque en ti busco refugio! ¡Líbrame de todos mis perseguidores!


En ti, Señor, busco refugio; jamás permitas que me avergüencen.


Yo digo al Señor: «Tú eres mi refugio, mi fortaleza, el Dios en quien confío».


¿Hasta cuándo, Señor, hasta cuándo habrán de ufanarse los malvados?


Al de carácter firme lo guardarás en perfecta paz, porque en ti confía.


Por eso dice el Señor y Dios: «Miren, yo pongo en Sión una piedra probada, piedra angular y preciosa para un cimiento firme; el que crea no se tambaleará.


para que le dijeran: «Tú, Ezequías, rey de Judá: No dejes que tu Dios, en quien confías, te engañe cuando dice: “No caerá Jerusalén en manos del rey de Asiria”.


Ahora, pues, Señor y Dios nuestro, sálvanos de su mano, para que todos los reinos de la tierra sepan que solo tú, Señor, eres Dios».


Por mi honor y por consideración a David mi siervo, defenderé esta ciudad y la salvaré».


Las lanzarás al aire y se las llevará el viento; un vendaval las dispersará. Pero tú te alegrarás en el Señor, te gloriarás en el Santo de Israel.


Los reyes te adoptarán como hijo y sus reinas serán tus nodrizas. Se postrarán ante ti rostro en tierra y lamerán el polvo que tú pises. Sabrás entonces que yo soy el Señor y que no quedarán avergonzados los que en mí confían».


¡No me pongas a mí en vergüenza; avergüénzalos a ellos! ¡No me llenes de terror a mí; aterrorízalos a ellos! Envíales tiempos de calamidad; ¡destrózalos y vuelve a destrozarlos!


Así dice la Escritura: «Todo el que confíe en él no será defraudado».


Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado.


Así dice la Escritura: «Miren, yo pongo en Sión una piedra angular escogida y preciosa, y el que confíe en ella no será jamás defraudado».


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite