Salmos 130:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

⁴ Pero en ti se halla perdón y por eso debes ser temido.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Pero en ti hay perdón, Para que seas reverenciado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ Pero tú ofreces perdón, para que aprendamos a temerte.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Pero de ti procede el perdón, y así se te venera.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ Pero en ti hay perdón, para que seas temido.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ Pero contigo está el perdón y así te haces temer.

Salmos 130:4 Referans Kwoze

2 Samuel 12:13

—¡He pecado contra el Señor! —reconoció David ante Natán. —El Señor ha perdonado ya tu pecado y no morirás —contestó Natán—.

Job 22:23

Si te vuelves al Todopoderoso y alejas de tu casa la maldad, serás del todo restaurado;

Salmos 25:11

Por amor a tu nombre, Señor, perdona mi gran iniquidad.

Salmos 86:5

Tú, Señor, eres bueno y perdonador; tu gran amor se derrama sobre todos los que te invocan.

Isaías 1:18

«Vengan, pongamos las cosas en claro», dice el Señor. «Aunque sus pecados sean como escarlata, quedarán blancos como la nieve. Aunque sean rojos como la púrpura, quedarán como la lana.

Isaías 55:7

Que abandone el malvado su camino y el perverso sus pensamientos. Que se vuelva al Señor, a nuestro Dios, que es generoso para perdonar y de él recibirá compasión.

Jeremías 31:34

Ya nadie tendrá que enseñar a su prójimo; tampoco dirá nadie a su hermano: “¡Conoce al Señor!”, porque todos, desde el más pequeño hasta el más grande, me conocerán», afirma el Señor. «Porque yo perdonaré su iniquidad y nunca más me acordaré de sus pecados».

Daniel 9:9

Pero aun cuando nos hemos rebelado contra ti, tú, Señor nuestro, eres un Dios compasivo y perdonador.

Oseas 3:5

Después ellos se arrepentirán y buscarán nuevamente al Señor su Dios y a David, su rey. En los últimos días acudirán con temor reverente al Señor y a sus bondades.

Hechos 9:31

Mientras tanto, la iglesia disfrutaba de paz a la vez que se consolidaba en toda Judea, Galilea y Samaria, pues vivía en el temor del Señor e iba creciendo en número, fortalecida por el Espíritu Santo.

Romanos 8:1

Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están en Cristo Jesús,

2 Corintios 5:19

Esto es, que en Cristo, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándole en cuenta sus pecados y encargándonos a nosotros el mensaje de la reconciliación.

Efesios 1:7

En él tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de su gracia

Colosenses 1:14

en quien tenemos redención y perdón de pecados.

2 Timoteo 2:19

A pesar de todo, el fundamento de Dios es sólido y se mantiene firme, pues está sellado con esta inscripción: «El Señor conoce a los suyos», y esta otra: «Que se aparte de la maldad todo el que invoca el nombre del Señor».